“No se puede permitir que den voz a los asesinos de nuestros hijos”

Hace un año, la expareja de Alina asesinó a sus dos hijas y se suicidó. La noticia del libro de Bretón le ha removido y explica que "para quien no ha pasado por una situación así es muy difícil entender el daño que puede provocar"

Ninguna administración ha ofrecido ayuda a Alina, ocho meses después del asesinato de sus hijas Sonia Martínez

“No se puede permitir, no se puede”, repite Alina. No es capaz de procesar la idea. No entiende cómo es posible; se muestra contrariada y sorprendida. No es para menos. Habla del libro de Bretón y de toda la polémica en torno a su publicación, que la ha removido en estos días.

La expareja de Alina asesinó a sus dos hijas, Larisa y Elisa, y luego se suicidó hace poco más de un año. Conoce una de las caras más amargas de la violencia vicaria y le resulta inverosímil que se debata si se debe dar voz a un asesino.

Ninguna administración ha ofrecido ayuda a Alina ocho meses después del asesinato de sus hijas

“Con mi nombre y apellidos, pero ¿cómo va a poder hacer eso?”

Cierra filas con Ruth Ortiz y, aunque no podría vivir una situación idéntica —ya que su maltratador se quitó la vida—, se pregunta qué ocurriría si algún familiar decidiera contar su versión de la historia. No sé ni lo que haría si mi excuñada, por ejemplo, hablase de mis hijas y de mí. No lo permitiría, no podría. Con mi nombre y apellidos, pero ¿cómo va a poder hacer eso?” Le cuesta procesar el concepto.

Alina conoce la fuerza de la empatía, pero asegura que es imposible que alguien que no haya vivido su situación comprenda su desazón ante lo que ha escuchado en los medios de comunicación sobre la libertad de expresión. “Me cuesta hablar de esto con gente que no lo ha vivido. Para quien no ha pasado por una situación así, es muy difícil entender el daño que puede provocar.”

“La gente no entiende nuestro sufrimiento”

Por eso, le gustaría que la justicia y la sociedad entendieran lo que supone para una víctima de violencia vicaria sufrir una revictimización. “Me da la sensación de que la gente no entiende nuestro sufrimiento. No entiende que hay días o meses en los que no comes, no entiende que estás sola, que sufres las secuelas del maltrato, que tienes pesadillas cada noche y te despiertas llorando y con ansiedad. No entiende que te sientes culpable de lo que ha pasado, no entiende el trauma psicológico que ha vivido esa mujer, no entiende nada o no les da la gana de entender”, se plantea.

Cree que la razón por la que no todo el mundo comprende la postura de Ruth y cómo el libro supone una agresión responde al machismo de la sociedad y a su falta de conocimientos sobre violencia de género, algo que, tras varios años dentro del sistema, tiene más que comprobado.

Nadie le ha ayudado y no tiene asistencia psicológica

No lo tiene fácil porque, a pesar de estar en pleno proceso de duelo, no recibe atención psicológica. La ha solicitado en el Instituto Andaluz de la Mujer, pero un año después, nadie la ha ayudado ni ha velado por su recuperación. “Antes de que pasase, me tomaron por loca en los juzgados. Después no recibí asistencia de ningún tipo. Y ahora, ¿pueden pasar 15 años y volver a dañarme?” se pregunta.

Una cadena de errores propició que la expareja de Alina asesinase a sus hijas y después se suicidara

Lo cierto es que resulta incomprensible que ninguna administración se haya puesto en contacto con Alina para ofrecerle ayuda psicológica, económica o algún tipo de acompañamiento. Ella se siente abandonada en el momento más duro de su vida e incluso reconoce que, de haber sabido cómo se desarrollaría todo, se habría planteado si denunciar. No la ayudaron antes ni tampoco después.

El recuerdo de Elisa y Larisa

Ahora está aprendiendo a vivir tras haberlo perdido todo y saca fuerzas del recuerdo de Larisa y Elisa. “Todo lo hago por ellas: ir a trabajar, no derrumbarme, intentar vivir. Cuando hablo de mis niñas, estoy riendo porque me acuerdo de los momentos felices que viví con ellas. Sí, también hubo cosas malas, pero son muchas más las buenas”.