La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género recoge 27 víctimas asesinadas este año y 1.271 mujeres desde que constan los primeros registros en el año 2003. 1.271 maltratadores por tanto. A menudo, el discurso fácil de buena parte de la sociedad es decir que estos agresores están “locos” o que “tienen enfermedades mentales“. Ahora también se dice mucho que los que matan a mujeres es porque son “extranjeros”, es decir, inmigrantes. Como si la procedencia de una persona tuviera que ver en un homicidio.
Ángeles Hernández, vicepresidenta y fundadora de la Asociación de Psicología y Psicoterapia Feminista, lo tiene claro: “Los maltratadores no tienen ninguna enfermedad mental“. Lo que tienen es “un excesivo control de la realidad y de las propias mujeres. Necesitan seguir ejerciendo el poder sobre ellas porque son muy dominantes y consideran a las mujeres de su pertenencia”.
La justificación patriarcal de la violencia
Para la psicóloga experta en violencia de género, que determinadas personas digan o piensen esto, se debe principalmente “al patriarcado que busca justificaciones a sus argumentos”. Sin ninguna duda asegura que “si ponemos el foco en el agresor y decimos que es vulnerable, está enfermo o que también ha sido víctima en la infancia, estamos justificando comportamientos narcisistas, discriminatorios y violentos“. Además, Hernández asegura que decir que los agresores tienen enfermedades mentales también “genera mucho estigma en personas con transtornos mentales que tratan de adaptarse a la sociedad y al ritmo de vida”.
“Si justificamos al agresor, entonces culpabilizamos a la víctima“, explica Ángeles Hernández. Una situación que, sin duda, no se debe producir nunca. Por eso, nunca se debe hacer referencia a la “salud mental o a si son extranjeros o tienen problemas emocionales. Porque todo ello, son justificaciones”.
Los padres que ejercen violencia sobre sus hijos e incluso los que llegan a matarlos tampoco tienen ninguna enfermedad mental. “Lo que tienen es un afán de poder y de querer ejercer dominio sobre las mujeres. Pero si no pueden hacerles daño directamente a ellas, lo hacen a través de los hijos. Es el castigo más grande que les pueden hacer“, explica Hernández. La psicóloga insiste en que la violencia no se produce por una enfermedad mental. “En ningún caso podemos buscar la justificación porque sería dejar de responsabilizar a la persona para hacer responsable a la enfermedad mental”.
¿Existe un perfil de hombre maltratador?
El agresor no tiene un perfil específico como tal. Sin embargo, todos ellos comparten una serie de pensamientos machistas: “Hay hombres muy inseguros que tratan de cubrir su inseguridad ejerciendo poder sobre las mujeres. También hay hombres muy narcisistas. Al final, son personas que solo quieren ejercer el poder y someter“.
La realidad que viven las víctimas con estos agresores se podría resumir en la obedicencia y la sumisión. “Mientras las mujeres obedezcamos, no hay violencia. Pero en el momento que la mujer rompe el perfil sumiso y se defiende o no hace algo que él quiere, la violencia crece”.
“Estamos normalizando la violencia de género”
A Hernández lo que más le preocupa en la actualidad es que “estamos normalizando la violencia de género con ideas negacionistas y argumentos patriarcales“. La única solución que ella ve posible frente al machismo, es el feminismo: “Un feminismo en base a políticas reales y efectivas dotadas de presupuesto con profesionales especializados y una agenda feminista clara basada en la educación“.
Para ella, la violencia de género no se va a acabar con “uno o cinco minutos de silencio en las puertas de los ayuntamientos“. Como hace dos días hizo la ministra de Igualdad. En cambio, la vicepresidenta y fundadora de la APPF, propone “campañas mantenidas en el tiempo. No solo mensajes temporales en fechas señaladas como el 25N o cuando se comete un asesinato nuevo. Tiene que ser algo mantenido en el tiempo con pretensiones a medio y largo plazo”.