Los llantos de un menor de edad que grita algo parecido a “no le pegues” o “no me pegues” han sobresaltado a los asistentes a la jornada organizada por la asociación Stop Violencia Vicaria en la Universidad de Burgos. Andrea Cabezas, su presidenta, se ha disculpado antes de dar paso al audio y ha asegurado que esos gritos “no pueden ser la banda sonora de ninguna infancia”. El impacto en el salón de actos ha sido evidente.
Ese era el objetivo: entender qué siente y qué pasa por la cabeza de un niño o una niña víctima de violencia. Cabezas ha aprovechado el acto para presentar su flamante asociación y ha advertido que su cometido es ser el “Pepito Grillo” de la violencia de género, señalando los fallos del sistema. Lo hacía, además, con la ministra de Igualdad sentada en primera fila.
Redondo trabaja en el Plan nacional contra la violencia vicaria
Ana Redondo, que también ha intervenido, ha adelantado que su gabinete trabaja en un ambicioso proyecto: definir el Plan nacional contra la violencia vicaria, tal como obliga el Pacto de Estado. Pretende que sea “ambicioso” y que incluya medidas de “sensibilización” y “prevención”. La ministra ha recordado que, en la gran mayoría de los casos, los asesinatos de niños y niñas suceden durante las visitas al progenitor y, por ello, ha subrayado que “un maltratador nunca es un buen padre”.

Patricia Melgar Alcantud, Teresa Peramato Martín, Andrea Cabezas Mateos, Isabel Blanco Llamas, Ana Redondo García, Alberto Gómez Barahona, Chelo Álvarez Sanchís, Rosa Guiralt Martínez y Antonio Gancedo Baranda en la jornada celebrada el viernes
La presidenta de Stop Violencia Vicaria y su vicepresidenta, Chelo Álvarez, han reunido a un importante plantel para tratar la violencia vicaria. Además de Ana Redondo, la jornada ha contado con la presencia de la vicepresidenta y consejera de Igualdad de Castilla y León, Isabel Blanco, y la fiscal de Sala Jefa de la Sección Penal del Tribunal Supremo, Teresa Peramato, quien ha señalado que “si no se protege a los hijos e hijas de las víctimas, no se protege a las madres”. Sobre los negacionistas de la violencia de género, la fiscal ha asegurado que “el dato mata el relato” y que las cifras son incontestables.
Falta formación en todos los operadores
Su compañera en la Fiscalía del Supremo, en la Sección Penal, Rosa Guiralt, ha reconocido que falta formación en la judicatura, tanto para fiscales como para jueces. Sin embargo, ha ido más allá y ha opinado que también los profesionales sanitarios, los trabajadores sociales, los docentes, la policía y los propios servicios sociales deberían recibir más formación en la materia.
Como experta, tras años dedicada al estudio de la violencia, Guiralt ha pedido a los operadores jurídicos que escuchen, que tengan empatía y que se tomen su tiempo con las víctimas para facilitar investigaciones más exhaustivas que permitan probar el maltrato.
El primer sitio donde acuden las víctimas, al médico
Isabel Giménez, magistrada y experta en igualdad y protección de menores en contextos de violencia de género, conocida por escribir cartas a los niños sobre los que decidía en sus sentencias, ha participado en la jornada a través de videoconferencia y ha recordado la importancia de escuchar a los menores y hacerlos partícipes de las resoluciones judiciales.
Por su parte, Antonio Gancedo, de la consulta de Pediatría Social del Hospital Universitario Fundación Alcorcón, ha preguntado, nada más subir al escenario, si había algún médico o enfermera en la sala. Ante la ausencia de manos alzadas, Gancedo se ha lamentado de la escasa formación en violencia de género entre los profesionales sanitarios. Ha señalado que este es un problema, ya que las víctimas de violencia suelen acudir en primer lugar al médico, y es allí donde se puede detectar la situación, orientarlas y acompañarlas.
Chelo Álvarez, psicóloga y vicepresidenta de Stop Violencia Vicaria, ha repasado las consecuencias emocionales en los niños y niñas víctimas de violencia y ha mostrado los dibujos que realizan en terapia sobre sus propias familias. Ha recordado que, a pesar de su valor, estos dibujos no se admiten como prueba en muchos juzgados. Ha sido otro momento impactante al evidenciar cómo perciben la violencia machista las mentes más jóvenes.
Violencia aisladora
Patricia Melgar, investigadora de la Universidad de Girona y experta en violencia aisladora o secundaria, ha explicado cómo se tiende a aislar a las víctimas de violencia de género de todo su entorno.
Miguel Lorente, médico forense y exdelegado del Gobierno contra la Violencia de Género, también ha participado de forma telemática y ha analizado los factores estructurales que perpetúan la desprotección de los menores. El acto ha sido clausurado por videoconferencia por la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza.