El nombre de Jennifer Lara acaparó titulares hace varios años tras un desgarrador momento que conmocionó a sus seguidores y al público en general. La influencer y extronista de Mujeres y Hombres y Viceversa mostró en un directo de Instagram el instante en que tuvo que entregar a su hija Ángel, de apenas dos años, a su expareja. Lo hizo acompañada por la Policía. La escena fue el resultado de una dura batalla judicial con la que lidió durante años y que ha marcado profundamente su vida.
Jennifer Lara, conocida por su paso por la televisión y su fuerte presencia en redes sociales, vivió momentos de felicidad con el nacimiento de su hija Ángel en enero de 2020. Sin embargo, solo tres meses después de ese acontecimiento, su relación con el padre de la niña comenzó a deteriorarse de forma irreversible.
En noviembre de 2020, la influencer reveló públicamente su sufrimiento. “Me ha dejado en la calle con un bebé de cuatro meses”, declaró entonces. Jennifer Lara acusó a su expareja de ser indiferente hacia su hija y de haberle sido infiel incluso durante su embarazo. La influencer aseguró que, tras su separación, el padre de Ángel no mostró interés en el bienestar de la pequeña ni en su situación económica.
La mudanza de Jennifer Lara que lo cambió todo
Jennifer Lara tomó la difícil decisión de abandonar Valladolid, ciudad donde residía, para mudarse a Alicante. Allí encontró un trabajo que le permitió estabilizarse económicamente y ofrecer una vida mejor a su hija. Sin embargo, este movimiento desencadenó el inicio del conflicto legal que culminaría con la pérdida de la custodia de Ángel.
El convenio regulador que Jennifer Lara firmó tras su separación incluía una cláusula que establecía que, si cualquiera de los progenitores se mudaba fuera de Valladolid, la custodia pasaría automáticamente al otro. Según Jennifer, aceptó estas condiciones sin asesoramiento legal y en un estado de vulnerabilidad emocional. “Cuando firmé el convenio tenía mucha presión y mucho miedo”, explicó. La mudanza a Alicante fue utilizada por su expareja para reclamar la custodia, argumentando que Jennifer había incumplido el acuerdo.
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En febrero de 2022, un tribunal otorgó la custodia al padre de Ángel. Para Jennifer Lara, esta decisión fue incomprensible. A fin de cuentas, según su versión, el padre no había demostrado interés constante en la vida de la niña. “No acudía a recoger a la niña cuando le tocaba, y a veces lo hacían sus padres”, afirmó la influencer.
A pesar de que Jennifer Lara ofreció volver a Valladolid para mantener la situación estable, su expareja presentó una denuncia contra ella por sustracción de menores y desobediencia a la autoridad judicial. La denuncia incluía la solicitud de tres años de cárcel y la inhabilitación de Jennifer para ejercer la patria potestad durante cuatro años.
El desgarrador momento de la entrega de Ángel
Hace dos años, Jennifer Lara vivió uno de los momentos más duros de su vida. La influencer tuvo que entregar a su hija Ángel, quien lloraba desconsoladamente mientras decía: “No quiero irme con papá”. Rodeada por su familia y vecinos, Jennifer entregó a la niña a las autoridades. La situación fue tan angustiosa que tuvo que ser atendida por los servicios de emergencias debido a un ataque de ansiedad. En un intento por visibilizar su caso y pedir apoyo, Jennifer retransmitió el momento en directo a través de Instagram. La reacción de sus seguidores no se hizo esperar, inundando las redes con mensajes de solidaridad y cariño hacia la influencer y su hija. Su caso sigue siendo muy recordado a día de hoy.