La Guardia Civil ha abierto una investigación para esclarecer las causas de lo que se considera que podría ser un crimen machista en el que ha fallecido una mujer de 40 años. Todo ha ocurrido este martes en La Mojonera, una localidad de Almería en lo que sería un nuevo caso de violencia de género, conforme a los indicios que se manejan. De confirmarse el carácter machista se trataría de la víctima número 39 en lo que va de año, a falta de la confirmación de un caso en Madrid. El autor ha confesado los hechos y según las primeras investigaciones, en el momento del crimen la hija de ambos de tres años estaba presente y otros dos menores figuran como empadronados en el mismo domicilio donde ha sucedido el ataque.
Según ha apuntado a EFE el alcalde de La Mojonera, José Miguel Hernández, el matrimonio residía en la calle Cuarta de La Mojonera junto a sus cuatro hijos, de tres, seis, 14 y 19 años, que han quedado bajo la atención de familiares que también residen en este municipio.
“Ahora estamos viendo con la Delegación del Gobierno de la Junta y con la Subdelegación del Gobierno qué se puede hacer, porque ha dejado cuatro hijos y cómo está la situación, por qué le ha cogido allí, en la casa, a la niña de tres años”, ha precisado.
Según el regidor, se trata de una familia que estaba “integrada con todos los vecinos” y que residía desde hace tiempo en La Mojonera, aunque no ha podido precisar el nombre del detenido o de la víctima mortal debido al escaso lapso de tiempo transcurrido desde el crimen.
Hace unas semanas, el pasado día 4 de octubre tuvo lugar otro asesinato por violencia de género también en Almería, en concreto en Roquetas de Mar. En este caso, la víctima había pedido ayuda hasta en dos ocasiones, pero no sirvió de nada. El sistema volvió a fallar y se llevó por delante la vida de una mujer de 56 años. Alrededor de las diez de la noche de ese día, la hija de la víctima llegó a casa y se encontró con su madre muerta con evidentes signos de violencia. Hasta el lugar se trasladaron agentes de la guardia civil y sanitarios del 061 que no pudieron hacer nada por su vida. La mujer presentaba heridas punzantes, compatibles con un arma blanca. Su pareja y agresor, de 72 años, confesó el crimen a los investigadores, según diversas fuentes, e intentó, al parecer, terminar con su propia vida con una ingesta de medicamentos. Fue trasladado al hospital donde sigue ingresado en calidad de detenido a la espera de tomarle declaración.
La historia de violencia de este hombre venía de largo. En 2021 la mujer puso en conocimiento de las autoridades su situación de malos tratos y consiguió una orden de alejamiento de su hoy asesino. Dos años más tarde, en 2023, volvió a pedir ayuda y volvió a denunciarlo. Sin embargo, en esta ocasión, y a pesar de los antecedentes, el juzgado no consideró necesario medida de protección alguna. La víctima estaba sola. Tanto es así que su caso se encontraba inactivo en el sistema VioGén, lo que significa que ningún agente realizaba, en principio, medidas de seguimiento de su situación.