En la madrugada de este jueves, un terremoto en Extremadura y Andalucía ha sacudido varias provincias con una magnitud de 4,1 en la escala de Richter. El seísmo, registrado a las 03:30 horas, tuvo su epicentro en la localidad sevillana de Cazalla de la Sierra y se ha sentido en Córdoba, Huelva y Badajoz. La información ha sido confirmada por el Instituto Nacional de Geofísica de Marruecos, organismo adscrito al Centro Nacional de Investigación Científica y Técnica.
El temblor, detectado a una profundidad de 10 kilómetros, ha provocado una serie de réplicas en la zona. Sin embargo, por el momento no se han reportado daños materiales significativos ni víctimas. A pesar de su intensidad moderada, este terremoto en Extremadura y Andalucía ha causado inquietud entre los ciudadanos, muchos de los cuales fueron despertados por el movimiento sísmico en plena madrugada.
¿Por qué ha ocurrido este terremoto en Extremadura y Andalucía?
Los terremotos en la península ibérica no son un fenómeno inusual, aunque la actividad sísmica suele ser más frecuente en el sur y sureste del país. La localización del terremoto en Extremadura y Andalucía se encuentra en una zona de contacto entre las placas tectónicas africana y euroasiática, cuya interacción provoca frecuentes movimientos sísmicos, especialmente en el área del mar de Alborán y el golfo de Cádiz.
Este seísmo en concreto es una consecuencia de la actividad tectónica en la región, donde las fuerzas de compresión entre ambas placas generan tensiones en la corteza terrestre. Aunque el terremoto en Extremadura y Andalucía no ha alcanzado una magnitud que lo haga especialmente destructivo, el hecho de que se haya sentido en varias provincias indica la importancia de los mecanismos geológicos que lo han originado.

La hermosa Plaza de España sevillana | Licencia Unsplash
Después del terremoto en Extremadura y Andalucía, el Instituto Nacional de Geofísica de Marruecos ha registrado varias réplicas en la zona. Estas sacudidas posteriores suelen ser habituales tras un evento sísmico y pueden prolongarse durante horas o incluso días. Aunque generalmente las réplicas son de menor intensidad, en algunos casos pueden alcanzar magnitudes similares o superiores al temblor principal.
Los expertos recomiendan a la población mantener la calma y seguir las indicaciones de los servicios de emergencia en caso de que se produzcan nuevos movimientos. En eventos sísmicos de mayor magnitud, el riesgo de daños en infraestructuras aumenta, especialmente en edificaciones antiguas o mal estructuradas. En esta ocasión, no se han registrado daños significativos. Sin embargo, las autoridades se mantienen alerta ante cualquier cambio en la actividad sísmica.