El veranillo de San Miguel es un fenómeno climatológico que tiene lugar alrededor del 29 de septiembre, fecha que coincide con la festividad de San Miguel. Se caracteriza por un repunte en las temperaturas, que en muchos casos alcanzan niveles propios del verano, justo antes de la llegada definitiva del otoño. Este fenómeno no ocurre todos los años, pero cuando lo hace permite disfrutar de días cálidos en pleno inicio de la nueva estación.
Este año, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido una alerta sobre la aparición del veranillo de San Miguel. Según los expertos, en 2024, este curso vendrá acompañado de un contraste meteorológico. Por lo visto, mientras algunas zonas disfrutarán de un clima cálido y soleado, otras regiones se enfrentarán a intensas lluvias.
¿Por qué ocurre el veranillo de San Miguel?
El veranillo de San Miguel es el resultado de un patrón de altas presiones que tiende a formarse sobre la Península Ibérica y gran parte del Mediterráneo durante esta época del año. Estas condiciones estabilizan la atmósfera y generan un aumento en las temperaturas. En contraste con los habituales frentes fríos de septiembre, el veranillo ofrece una tregua en la bajada de temperaturas que normalmente acompaña al fin del verano.
Una turista se protege del calor con parasol mientras pasea por el centro de Valencia | EFE/Ana Escobar
En particular, el veranillo de San Miguel se forma cuando las altas presiones impiden la entrada de masas de aire frío. Y, en lugar de eso, permiten la llegada de vientos más cálidos desde el sur. Este fenómeno, además de prolongar las condiciones veraniegas en algunas zonas, también puede estar influido por factores locales como la orografía y la cercanía al mar.
Así será el veranillo de San Miguel en 2024
En 2024, las predicciones de la AEMET indican que el veranillo de San Miguel no afectará de manera uniforme a toda España. Mientras que regiones como el sureste de la Península —particularmente Murcia, Alicante y Valencia— experimentarán un marcado ascenso en las temperaturas, otras zonas como el noroeste y la meseta norte estarán bajo la influencia de frentes fríos que provocarán lluvias e incluso una bajada de las temperaturas.
Se espera que en la región mediterránea las temperaturas superen los 30°C. Habrá picos de hasta 34°C en algunos puntos como Almería o Murcia. Estas condiciones serán ideales para prolongar la temporada de playa, permitiendo a los residentes y turistas disfrutar de los últimos rayos de sol antes del otoño.
Una estampa otoñal en una carretera llena de hojas caídas de los árboles | Shutterstock
Por otro lado, la zona norte de la Península, como Galicia y el Cantábrico, podría lidiar con lluvias orográficas provocadas por la entrada de una nueva borrasca. Esta combinación de climas tan diferentes entre el norte y el sur crea una dualidad meteorológica propia del inicio del otoño.