Mayo, además de ser el mes de las flores, también es la fecha marcada en el calendario para dar el pistoletazo de salida a la temporada de bodas. Urbanas, campestres, playeras, religiosas o civiles, los tipos de enlaces que podemos encontrar son prácticamente infinitos. Y siempre surge la misma pregunta: ¿qué me pongo?
España es uno de los países que puede presumir de tener una de las industrias nupciales más importantes del mundo y no solo en lo que a trajes de novia se refieres. La industria que rodea a las invitadas y madrinas es también espectacular y es que, las españolas son, posiblemente, las mujeres que más se preocupan por su look a la hora de acudir a un enlace. Figuras como Inés Domecq, considerada una de las mujeres más elegantes de nuestro país, o Alejandra Domínguez, han marcado un estilo a las que muchas recurren a la hora de inspirarse para acudir a estas citas.
Una de las claves para acertar temporada tras temporada es conocer los colores que más se llevan y, en 2024, reinan tonalidades como los malva y los azules bebé. Resultan opciones elegantes y con un punto de color que cumplen a la perfección esa idea de ir guapa y elegante, pero sin hacerle sombra a la novia. Otra opción, menos discreta pero que también funciona, es recurrir a grandes estampados, con un punto étnico o floral, con los que conseguiremos ser las invitadas más originales. Encontramos este tipo de opciones en propuestas como la colección que presentó recientemente Juan Avellaneda en colaboración con la firma See Iou.
En cuanto a las siluetas, hay ciertos detalles en los que fijarse. Por una parte, encontramos que van a tener mucha importancia los hombros. Y estos pueden ir descubiertos, con escotes Bardot o halter, que son los más en boga este año, o cubiertos con hombreras XXL o grandes mangas abullonadas, como vemos en colecciones como las de Anna Collado, Pedro del Hierro o la propia Inés Domecq.
A la hora de completar el look y dada la ocasión en la que nos encontramos, no está de más recurrir a alguna joya importante. Para ello podemos optar por dos opciones. Como hacía Coco Chanel, una posibilidad es recurrir a la alta bisutería donde encontraremos diseños más desenfadados y llenos de color, con el que aportar ese toque especial a nuestro conjunto. Una de las firmas que mejor nos solucionan esto es Anton Heunis, que propone siempre piezas espectaculares gracias a su infinito universo creativo. Si preferimos recurrir a la elegancia de la cerámica, Andrés Gallardo puede ser también una buena opción, como su línea Ikebana, donde tenemos los aros de flores.
Otra forma de darle un punto de luz a nuestro rostro, esta vez de joyería, es jugando con piedras como el coral, diseños que encontramos en joyerías como Rabat. En este caso se trata de piezas más importantes que podrán completar por ellas mismas cualquier look.
Las bodas ya no se conciben sin llevar la cabeza cubierta y este año volveremos a seguir fieles a esta tradición ya instalada en nuestras costumbres. Poco a poco, eso sí, los tocados han ido cediendo paso a otras opciones, como son las pamelas. Cada vez más, vemos como nos arriesgamos a introducir estos accesorios en nuestros outfits para bodas. Este año se llevan grandes, para protegernos del sol, pero también para no pasar desapercibidas, y realizadas en materiales naturales. Artistas como Lydia F. Díaz crean verdaderas obras de arte para la cabeza pintadas a mano que resultan, además de elegantes, piezas únicas. Y otra opción para tocar nuestra cabeza son los lazos. Llegados directamente desde las pasarelas más importantes, ya sean a un lado, en coleta o en tejidos como la rafia, son una de las opciones que más vamos a ver en los meses que vienen. Mimoki fue una de las responsables de poner de moda los tocados en nuestro país y este año presenta, claro está, opciones para lucir una de las tendencias del año en lo que a moda para la cabeza se refiere.
Los lazos también son un básico que se repiten en otros accesorios imprescindibles para conseguir un look de 10: los zapatos. Pero, en este caso, comparten protagonismo con otras apuestas para ser la perfecta invitada. Por una parte, en 2024 parece imponerse la comodidad con las bailarinas o las mules como una de las opciones estrella de este año. La firma española Pedro García suma a este diseño dos de las tendencias fuertes de la temporada: el bling bling y el color negro, haciendo del modelo Erica el zapato perfecto para triunfar.
Frente a esto, por último, el tacón también busca su sitio. Nos gusta para en este caso creaciones románticas como las que propone Martinelli junto a Redondo Brand, donde se impone el color rojo, el favorito del diseñador, y las flores, lo que obligará, eso sí, a optar por diseños midi, para dejar ver bien nuestros zapatos.