Basta con echar un vistazo a los front row de las semanas de la moda internacionales para tener una radiografía de quienes son las figuras que en ese momento son verdaderamente relevantes en el universo de la cultura pop. Mientras que antes eran los influencers quienes ocupaban ese privilegiado, en la actualidad son las estrellas del deporte quienes además de ver los desfiles desde la primera fila, son en muchos casos las embajadoras de las grandes firmas de lujo. Por si fuera poco, el premio al Icono de la Moda de 2023 fue entregado el pasado mes de noviembre a Serena Williams, siendo esta la primera vez que una figura del mundo del deporte ha sido reconocida con un galardón vinculado a las tendencias. “Desde que era niña, he usado la moda como una forma de expresión. La moda me ha dado la confianza necesaria para entrar a la cancha y reconocer quién era y hacia dónde ir”, dijo Serena Williams. “El sueño de tener mi propia marca, S by Serena, se ha hecho realidad y a lo largo de mi carrera he tenido la suerte de colaborar con los diseñadores más consagrados. Me divertí mucho aprendiendo acerca de mi propio estilo y permitiendo que cambiara a medida que mi vida evolucionaba, pero siempre he sostenido una cosa: la moda es para todos, sin importar la talla, la raza o el dinero. Me siento increíblemente honrada de recibir el prestigioso premio Fashion Icon Award de la CFDA, una organización cuyo trabajo admiro desde hace mucho tiempo, así como de estar entre los iconos de estilo que siempre he admirado”, ha asegurado.
El tenis y la moda llevan años caminando de la mano, aunque quizás es ahora el momento álgido de esta pareja, pues a raíz del estreno de la película ‘Challengers’, el tenniscore es pura tendencia. En la cinta vemos en infinidad de ocasiones prendas de Uniqlo, pero también bolsos de Loewe y zapatos de Chanel, dejando así claro que la pista de tenis es la nueva pasarela, aunque por descontado, las últimas firmas no aparecían en pleno partido. Otra señal de que el tenis está de moda es la colección Roger Federer by JW ANDERSON para Uniqlo, que regresa esta nueva temporada para celebrar la historia y la estética del tenis inspirándose en la indumentaria y las siluetas del tenis vintage de los años 1970 y 1980.
Y qué decir del fútbol, que ha hecho que las tendencias se infiltren incluso en las casas de la mano de la Copa Mundial, pues Louis Vuitton es desde 2010 la firma encargada de diseñar el baúl en el que se resguarda el trofeo. Por ello, su característico estampado monogram se instaura en la mente incluso de quienes tienen cero interés por la moda cuando ven el momento rompe-audiencias en el que un equipo eleva el trofeo. Messi, por cierto, es protagonista de la campaña en la que las codiciadas maletas de la maison reinan, y en 2022 protagonizó junto a Cristiano Ronaldo una comentada campaña de la marca en la que los reyes del balón se enfrentan en una partida de ajedrez. ¿Más pruebas de esta goleada? Héctor Bellerín desfiló para Louis Vuitton en 2022, y este año María Escoté ha sorprendido al lanzar una camiseta para FC Barcelona con la que celebrar el Día de la Mujer. Mientras tanto, Diana Al Shammari está arrasando con sus camisetas de equipos de futbol bordadas con flores, que incluso Joe Jonas ha llevado en pleno concierto, y Pharrell Williams para Louis Vuitton ya ha incluido en su última colección camisetas futboleras en las que el equipo, cómo no, no es otro que la propia marca.
Pero al hablar de este match entre el deporte y la moda hay una firma que lleva tiempo poniendo en marcha una operación de dominación digna de una Kardashian… Porque de hecho, quien la opera no es otra que Kim Kardashian. En las Olimpiadas, su firma Skims fue la encargada de proporcionar ropa interior, ropa de estar por casa y pijamas para las atletas estadounidenses en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio. Kim fue la responsable de dar a conocer la noticia compartiendo imágenes de los atletas del equipo de EE. UU. modelando la colección en Instagram. “Desde que tenía 10 años, he escuchado cada detalle sobre los Juegos Olímpicos”, escribió Kardashian West en la publicación, aludiendo con sus palabras a Caitlyn Jenner, que ganó una medalla de oro en el evento de decatlón en los Juegos Olímpicos de 1976. “Cuando recibí la llamada invitando a Skims a ser parte del equipo, cada momento que pasé admirando la fuerza y la energía de los atletas olímpicos desde la barrera se encargaron de cerrar el círculo”, aseguró. ¿Creemos que fueron ellos los que se pusieron en contacto con ella y no al revés? Mmmm, el silencio nos delata, sobre todo cuando desde entonces, la marca está siempre ha estado vinculada con el deporte…
Hace pocos días, tras haber apostado ya por introducir diseños para hombre en la firma contando con astros deportivos como Shai Gilgeous-Alexander, Skims ha presentado su primera campaña protagonizada por jugadoras de baloncesto. En octubre se convirtió en el primer socio oficial de ropa interior de la N.B.A., la W.N.B.A. y baloncesto de Estados Unidos, y con esta campaña, en la que vemos a astros del deporte de la talla de Kelsey Plum y Cameron Brink, que en la alfombra roja de WNBA draft ha lucido un predisponente vestido asimétrico de Balmain. “Mis fans saben cuánto amo la moda. Skims ha sido un must en mis elecciones de ropa interior desde hace años. Estoy realmente agradecida de haber formado parte de esta alineación de jugadoras, especialmente con aquellas a las que he admirado durante tanto tiempo. Es realmente un sueño hecho realidad trabajar con una marca que amo tanto”, ha dicho Brink.
Como señala la periodista experta en moda Vanessa Friedman, una marca es una colección de valores abarcados por un nombre, un logotipo o un objeto, por lo que es un símbolo que representa, no sólo la belleza, sino también la excelencia, la aspiración, el poder y el activismo, que son atributos que se vinculan siempre a los atletas. Por eso esta relación es tan sólida, y por ello, del mismo modo que las estrellas de Hollywood comprendieron pronto que sus looks sobre la alfombra roja eran vitales para erigirse a sí mismos casi como marcas, los deportistas cuidan su estilo con mesura ahora más que nunca. Estilistas como Sydney Bordonaro, Kesha McLeod y Rachel Johnson están demostrando que vestir a las estrellas del deporte es un plan perfecto para quienes aman orquestar looks, y teniendo en mente la de cuentas de Instagram que inmortalizan a los jugadores y jugadoras más allá de sus labores deportivas, el estilo ahora importa en el deporte más que nunca.
La moda le ha metido un gol al deporte, y el deporte ha hecho lo propio a la moda. Asistimos a un empate estilístico que hace que quienes no sienten interés alguno por los partidos tengan nuevos motivos para estar atentos, y quienes no quieren saber nada de la moda se encuentran con que los astros deportivos llevan outfits de firmas de renombre, que terminan por instaurarse, de forma sutil y silenciosa, en sus cabezas. Por fin, un partido en el que ganan todos, ¿no?