La Lotería está llena de historias increíbles, pero pocas tan sorprendentes como la de Stephen Muñoz Espinoza, un residente de Delray Beach, Florida, que ganó un millón de dólares (unos 950.000 euros) gracias a un giro inesperado del destino. Lo que comenzó como un día común terminó cambiando su vida para siempre, y todo ocurrió porque un desconocido decidió colarse en la fila para comprar un billete.
Un día cualquiera que cambió su destino
Según informó el medio People, el día de Stephen parecía no tener nada fuera de lo normal. Era una jornada larga y normal, y en un momento de improvisación, decidió parar en un supermercado Publix, donde solía comprar habitualmente, para probar suerte con la Lotería.
En Estados Unidos, muchos supermercados cuentan con máquinas expendedoras y mostradores para adquirir boletos de diferentes sorteos, incluyendo los populares ‘rascas’. Stephen tenía en mente comprar un décimo del juego 500X THE CASH, un tipo de billete similar al “Rasca y Gana” en España, que ofrece premios multimillonarios aunque con probabilidades de éxito de 1 entre 4,5.
Una fotografía del rasca y gana estadounidense 500X The Cash | Sarasota Herald-Tribune
Mientras hacía cola para comprar su boleto en la máquina expendedora, un desconocido se adelantó en la fila, haciendo que Stephen perdiera su turno. Este pequeño contratiempo, que en otro contexto podría haber sido una simple molestia, resultó ser el momento decisivo que lo llevó a comprar el décimo ganador.
El billete de Lotería que lo transformó todo
En lugar de discutir, Stephen decidió mantener la calma y acudir al mostrador del supermercado para comprar su billete. Lo que no sabía era que este gesto lo llevaría a convertirse en millonario.
“En lugar de decir algo, decidí comprar un billete en el mostrador”, explicó Stephen. Fue allí donde adquirió el rasca que contenía el premio de un millón de dólares. Su sorpresa al descubrir el resultado fue indescriptible: “¡No puedo creer que gané un millón de dólares!”, comentó emocionado.
Como suele ser habitual en este tipo de sorteos, los ganadores tienen dos opciones para recibir el premio: cobrar la cantidad total en varios pagos a lo largo del tiempo o recibir un pago único, con un ajuste que reduce el importe final. Stephen optó por la segunda opción, llevándose a casa 820.000 dólares (unos 776.000 euros) tras los ajustes correspondientes. Este dinero no solo marcó un antes y un después en su vida, sino que también benefició al supermercado Publix, que recibió una comisión de 2.000 dólares (aproximadamente 1.900 euros) por haber vendido el billete ganador.