En los últimos meses, la Guardia Civil ha lanzado una contundente advertencia sobre el incremento de fraudes relacionados con las tarjetas de crédito y débito en España. Una situación que ha encendido las alarmas a nivel nacional. Este fenómeno, que no distingue entre usuarios comunes y empresarios, pone en evidencia la vulnerabilidad de los sistemas de seguridad y la astucia de los delincuentes que operan en el ámbito digital. La advertencia de la Guardia Civil, basada en el análisis de múltiples casos y en la observación de tendencias internacionales, pone de relieve la importancia de adoptar medidas preventivas y de ser conscientes de las nuevas modalidades de fraude.
El auge de los fraudes con tarjetas de crédito
Los fraudes con tarjetas de crédito no son un fenómeno nuevo. Sin embargo, su evolución y sofisticación en la era digital han incrementado su prevalencia y peligrosidad. Los métodos de los delincuentes han evolucionado desde simples robos físicos de tarjetas hasta complejas operaciones de phishing y clonación de tarjetas mediante dispositivos electrónicos. La advertencia de la Guardia Civil pone énfasis en estas técnicas avanzadas que permiten a los estafadores robar información crítica sin que la víctima se dé cuenta.
Uno de los métodos más comunes es el uso de dispositivos skimmers, que se colocan en cajeros automáticos o en terminales de punto de venta (TPV). Estos dispositivos capturan los datos de la banda magnética de las tarjetas cuando los usuarios las deslizan para realizar una transacción. A pesar de que la tecnología de los chips EMV ha reducido en gran medida la efectividad de los skimmers, estos dispositivos siguen siendo una gran amenaza.
La advertencia de la Guardia Civil para evitar “sustos”
Ten cuidado a la hora de pagar con tarjeta de crédito en un establecimiento (Pexels)
En respuesta a esta creciente amenaza, la Guardia Civil ha emitido una serie de recomendaciones dirigidas a la población para protegerse contra los fraudes con tarjetas de crédito. Una de las principales sugerencias es no compartir información personal ni detalles de las tarjetas en plataformas digitales que no sean seguras. La autenticación de dos pasos se destaca como una medida de seguridad crucial. A fin de cuentas, añade una capa adicional de protección que dificulta el acceso no autorizado a las cuentas bancarias y de tarjetas.
Asimismo, se aconseja a los usuarios que revisen regularmente los movimientos de sus cuentas para detectar cualquier actividad sospechosa lo antes posible. La pronta detección de transacciones no autorizadas puede marcar la diferencia entre una pequeña pérdida y un fraude devastador.
Un aspecto crucial de la advertencia de la Guardia Civil es la recomendación de mantener siempre la tarjeta a la vista al realizar pagos. Este consejo, aparentemente sencillo, puede prevenir situaciones en las que los delincuentes tengan la oportunidad de clonar la tarjeta mediante dispositivos móviles ocultos. En lugares donde no es posible ver el TPV, como en algunos restaurantes o tiendas, se recomienda solicitar un lector móvil que permita realizar el pago de manera segura y bajo la supervisión del usuario.