En un mundo globalizado donde los concursos de belleza se siguen percibiendo como instituciones que perpetúan la visión tradicional de la mujer, la historia de Chidimma Adetshina, una joven abogada sudafricana elegida Miss Nigeria, ha puesto de manifiesto las tensiones raciales y xenofóbicas que aún persisten en África. A sus 23 años, Adetshina se ha enfrentado una odisea personal que refleja las complejidades de la identidad, el racismo y la discriminación dentro del continente africano. Una serie de temas que, aunque están presentes en todo el mundo, se manifiestan con particular intensidad en Sudáfrica.
Chidimma Adetshina fue coronada Miss Nigeria 2024 en un concurso marcado por la controversia y el odio racial que la han perseguido desde el inicio de su carrera en los certámenes de belleza. Nacida en Soweto, Sudáfrica, de padre nigeriano y madre sudafricana de ascendencia mozambiqueña, Adetshina siempre se sintió orgullosa de su herencia mixta. Sin embargo, fue precisamente esta identidad la que desató una ola de ataques xenófobos cuando decidió participar en Miss Sudáfrica.
A pesar de que cumplía con todos los requisitos para representar a Sudáfrica en el certamen, fue objeto de una campaña de odio en redes sociales. Se le cuestionó por no ser “suficientemente sudafricana”. Las críticas alcanzaron su punto álgido cuando se propagaron rumores sobre posibles irregularidades en la documentación de su nacimiento. Eso generó un ambiente hostil aún más hostil. Un ambiente que la obligó a retirarse del concurso por su seguridad y la de su familia.
El racismo y la afrofobia en Sudáfrica
La historia de Chidimma Adetshina pone de manifiesto las profundas divisiones que aún existen en Sudáfrica. Un país que, a pesar de haber superado oficialmente el apartheid hace tres décadas, sigue lidiando con el racismo y la afrofobia. Estos prejuicios no solo se limitan a la población blanca, sino que también se manifiestan entre diferentes grupos étnicos negros, creando un complejo entramado de discriminación basado en el origen y el color de la piel.
El término “makwerekwere”, utilizado despectivamente en Sudáfrica para referirse a inmigrantes africanos, se ha convertido en un símbolo de esta división social. Las redes, que deberían ser un espacio para el diálogo y la conexión, han exacerbado estos sentimientos. Permiten que el odio se difunda con mayor facilidad.
El mensaje de Chidimma Adetshina
A pesar de las dificultades, Chidimma Adetshina no se dejó vencer. Tras retirarse de Miss Sudáfrica, fue invitada a participar en el concurso Miss Nigeria, donde finalmente fue coronada como la ganadora. Esta victoria supone un logro personal para Adetshina, pero también representa un símbolo de resistencia contra el odio y la discriminación que enfrentó.
En su discurso de aceptación, Miss Nigeria hizo un llamada a la unidad africana y al derribo de las barreras que aún separan a los pueblos del continente. “Derribemos las barreras que nos separan”, dijo. “Fomentemos un continente donde todos los africanos puedan moverse libremente sin prejuicios, perseguir sus sueños y contribuir al crecimiento y la prosperidad de nuestro gran continente. Esta corona no es sólo un símbolo de belleza, es una llamada a la acción. Gracias a todos por vuestro apoyo y confianza en mí. Estoy emocionada por el viaje que tengo por delante y por la oportunidad de ser Miss Universo Nigeria”.