El sector del transporte en España vivirá dos días críticos con la huelga de autobuses del 28 y 29 de noviembre. Esta protesta, que afecta tanto al transporte urbano e interurbano como al discrecional y al de mercancías por carretera, busca poner sobre la mesa las demandas de los conductores profesionales, un colectivo que exige mejoras laborales y cambios en las políticas de jubilación anticipada.
¿Quién convoca la huelga de autobuses del 28 y 29 de noviembre?
La huelga de autobuses del 28 y 29 de noviembre ha sido convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT) y cuenta con el apoyo de CCOO. Ambas instituciones mantienen su compromiso con las movilizaciones tras semanas de negociaciones fallidas.
Sin embargo, otros sindicatos como UGT y el Sindicato Libre de Transporte (SLT) decidieron desmarcarse tras alcanzar acuerdos con las patronales del sector, Confebus y ATUC, que incluyen compromisos relacionados con la jubilación anticipada y la sostenibilidad económica de las empresas de transporte.
El paro está dirigido a los conductores de autobuses urbanos, interurbanos y de transporte discrecional, incluyendo las rutas escolares. Además, la huelga de autobuses del 28 y 29 de noviembre afecta a conductores de vehículos destinados al transporte de viajeros de más de nueve plazas.
Motivos de la huelga de autobuses del 28 y 29 de noviembre: jubilación anticipada y condiciones laborales
El principal motivo que ha llevado a convocar la huelga de autobuses del 28 y 29 de noviembre es la demanda de una jubilación anticipada sin merma económica para los conductores profesionales. Este colectivo considera que su trabajo, expuesto a condiciones laborales adversas, debe ser reconocido como actividad penosa. Entre los riesgos laborales destacan:
- Exposición a vibraciones y posturas estáticas prolongadas.
- Ruido constante y agentes químicos como gases de combustión diésel.
- Problemas musculoesqueléticos, auditivos y respiratorios.
Desde CGT y CCOO se insiste en que la edad actual de jubilación contribuye a un aumento de la siniestralidad laboral entre los conductores de mayor edad. Según datos de los sindicatos, más del 60% de los accidentes laborales mortales en el sector afectan a trabajadores mayores de 55 años.
Además, la huelga de autobuses del 28 y 29 de noviembre busca denunciar las condiciones de precariedad que afrontan muchos trabajadores del transporte, como salarios insuficientes y jornadas laborales que exceden los límites establecidos.