“En el caso de Íñigo Errejón se produce una asociación entre un adicto al sexo y un acosador”

Un psicólogo experto en adicciones explica que una persona adicta cumple con sus obligaciones pero "en su cabeza está funcionando a medias porque está esperando el momento de consumir su adicción"

Íñigo Errejón
Íñigo Errejón KiloyCuarto

“Un adicto al sexo es una persona normal y corriente. ¿Quién lo iba a pensar de Errejón con la imagen de formalidad y bondad que tenía? Son personas que trabajan, que cumplen con sus obligaciones, sus familias y sus trabajos. Pero en su cabeza, están funcionando a medias porque están esperando el momento del consumo de su adicción”. ¿Es Íñigo Errejón adicto al sexo? Según publicó El Confidencial, el político llevaría varios meses yendo a terapia para curarse de su adicción al sexo y otras sustancias.

Según Fernando Botana, psicólogo experto en adicciones de Impasse Adicciones, en el caso de Íñigo Errejón “se produce una asociación entre un adicto al sexo y un acosador”. En este aspecto, el experto insiste en que “un adicto al sexo no tiene por qué ser un agresor”.

Tratamiento para la adicción al sexo

Los adictos al sexo se pueden curar. Sin embargo, Botana advierte de que esta adicción no es igual que una adicción a las drogas en la que se corta su consumo porque “el sexo forma parte de la vida y es saludable que esté presente”. Motivo por el que esta adicción tiene “una complejidad mayor” que las demás.

Como parte del tratamiento obligatorio para un adicto al sexo se encuentra la psicoterapia individual en la que la persona le cuenta al psicólogo lo que le ocurre y le habla de su vida. Botana explica que en ese momento “el problema empieza a solucionarse”.

Durante esta terapia individual, llegado el momento, comenzará un periodo de abstinencia del sexo. Sin embargo, no es para siempre como ocurre con las drogas, sino que después “tienen que volver a tener relaciones sexuales saludables“. El especialista advierte de que esto requiere “un trabajo largo, personal, de cambio de mentalidad y de cambio en la forma de relacionarse”. En resumen, “un cambio personal global“.

Una parte opcional de este tratamiento pueden ser las terapias de grupo. Estas según el experto están indicadas para aquellos adictos que necesiten salir a buscar sexo todos los días. “En estos casos la terapia de grupo le servirá de acompañamiento con un seguimiento más diario”.

Las clínicas de ingreso en la adicción al sexo “no suelen ser habituales”, según señala Botana. Así mismo, es muy difícil determinar en cuánto tiempo se puede curar un adicto al sexo puesto que “depende de su historia y en el momento en el que esté”. Pues el especialista explica que “no es lo mismo un chico de 27 años que un hombre de 45 que ya ha pasado todas las fiestas”.

No obstante, advierte de que curar una adicción “es un proceso largo que lleva tiempo. No es una cuestión de voy a ir a terapia durante varias sesiones y me curo”.

Perfil de un adicto al sexo

Fernando Botana explica que la mayoría de pacientes adictos al sexo son “entre un 80% y un 90% hombres“. Según él, “esta no es una problemática de mujeres”.

Una peculiaridad en los adictos al sexo es que es “muy frecuente” que sean también adictos a las drogas. Esto ocurre principalmente porque “el consumir facilita también las relaciones sexuales”. El experto señala directamente a los prostíbulos como un negocio en el que incitan esta doble adicción: “Cuando llega el cliente le incitan que consuma y les hacen estar más tiempo y gastar más dinero. Es un círculo vicioso que ha creado una nueva problemática”.