La Dirección General de Tráfico ha iniciado una consulta pública previa a la modificación del Real Decreto 818/2009, de 8 de mayo, que regula el Reglamento General de Conductores en España. Esta modificación pretende incorporar el carnet B1, que permitirá conducir a partir de los 16 años. Con esta iniciativa, el Gobierno busca recabar opiniones de ciudadanos, organizaciones y asociaciones hasta el próximo 23 de julio, con el objetivo de adaptar y mejorar la normativa vigente. Y adelantar la edad para poder conducir.
El principal objetivo de esta reforma es mejorar la capacitación y formación de los conductores, reducir la siniestralidad vial, promover la movilidad sostenible y la micromovilidad urbana y fortalecer la conexión en zonas despobladas. La DGT, bajo la dirección de Pere Navarro, ha subrayado la importancia de ajustar los plazos administrativos a las necesidades reales, con vistas a implementar eficazmente la ‘Estrategia de Seguridad Vial 2030’. Todo apunta a que el Gobierno de España está valorando la opción de adelantar la edad para poder conducir. Esa edad se adelantaría a los 16 años, frente a los 18 que hay ahora mismo.
Seguridad vial y nuevos vehículos
La introducción del carnet B1 busca reducir la siniestralidad mediante la actualización de los requisitos de aptitudes y conocimientos para la obtención del permiso A1. Esta actualización pretende mejorar la formación de los conductores desde una edad más temprana, lo que, según el Gobierno, contribuirá significativamente a la seguridad vial. Además, los vehículos que podrán conducirse con el permiso B1 serán exclusivamente eléctricos. Lo que refuerza el compromiso con la movilidad sostenible.
Ramón Ledesma, consejero asesor de la consultora PONS Mobility, ha destacado la importancia del nuevo permiso de conducir B1, indicando que permitirá la entrada al mercado de una nueva tipología de vehículos periurbanos, más razonables y sostenibles que los actuales. Ledesma describe estos vehículos como cuadriciclos pesados, eléctricos, con dimensiones reducidas y una velocidad máxima de 90 km/h. Este tipo de vehículo, fácil de manejar y con baterías eficientes, se perfila como una alternativa viable para sustituir ciertos vehículos privados que actualmente no se adaptan bien al entorno urbano.
Micromovilidad urbana y zonas despobladas
El fomento de la micromovilidad urbana es uno de los argumentos centrales de la propuesta del carnet B1. Según el documento de la DGT, la introducción de alternativas de transporte más eficientes y sostenibles es esencial para mejorar la calidad de vida en las ciudades y reducir la dependencia de vehículos privados contaminantes. En áreas urbanas, se espera que la tendencia sea un mayor uso del transporte público, motocicletas y bicicletas, pero en aquellos casos donde esto no sea viable, los cuadriciclos eléctricos representarán la opción más segura y sostenible.
Además, la propuesta también se enfoca en mejorar la red de comunicación y transporte en zonas despobladas, donde las opciones de movilidad suelen ser limitadas. La incorporación del carnet B1 y sus correspondientes vehículos podría ofrecer soluciones efectivas para la movilidad en estas áreas, promoviendo una mayor integración y conectividad.
La consulta pública que se lleva a cabo es un paso crucial para la implementación de esta reforma. El feedback de los ciudadanos y organizaciones ayudará a afinar los detalles de la propuesta y garantizar que se atienden las preocupaciones y necesidades de todos los actores involucrados. Según las previsiones, esta reforma podría entrar en vigor antes de finales de 2024, tras pasar por los trámites administrativos y legislativos correspondientes.