El asesinato de un niño de once años en Mocejón, Toledo, ha dejado una comunidad consternada y en busca de respuestas. Mateo, un niño alegre y muy querido en el pueblo, fue brutalmente apuñalado en el campo de fútbol municipal. Un lugar donde la inocencia y la alegría de los niños eran la norma. Sin embargo, la mañana del fatídico domingo 18 de agosto, el campo se convirtió en la escena de un crimen que ha sacudido no solo a Mocejón, sino a toda España.
La noticia del asesinato de Mateo se difundió rápidamente por las calles de Mocejón. Los vecinos, incrédulos, se congregaron en grupos pequeños. Nadie se creía los rumores que corrían. Nadie podía entender cómo un acto tan violento había tenido lugar en su tranquila localidad. La familia de Mateo, conocida por su negocio de panadería, no podía creer lo que había sucedido.
La Guardia Civil no tardó en poner en marcha una operación de gran envergadura para intentar capturar al responsable del crimen. Una ‘operación jaula‘ fue activada, bloqueando las posibles rutas de escape del agresor. Testigos oculares describieron al sospechoso como un individuo encapuchado que huyó rápidamente del lugar en un coche de color gris. Sin embargo, hasta el momento, la identidad del asesino sigue siendo un misterio.
Bandas latinas, terrorismo y más: las teorías detrás del crimen de Mocejón
Desde el primer momento, varias teorías han circulado sobre las posibles razones detrás de este acto brutal. Una de las hipótesis más comentadas es la de una posible venganza personal o familiar. Mocejón es un pueblo pequeño donde todos se conocen. Y algunos sugieren que podría tratarse de un ajuste de cuentas que involucraba directamente a la familia del niño.
Otra línea de investigación considera la posibilidad de un ataque aleatorio por parte de una persona con trastornos mentales. En casos anteriores, se ha visto cómo individuos en estados de enajenación han cometido actos violentos sin un motivo aparente. Esta teoría ha cobrado fuerza con el paso de las horas. Especialmente, en las redes sociales, donde se ha especulado ampliamente sobre la posibilidad de que el agresor sea alguien de fuera del pueblo.
¿Tiene algo que ver el terrorismo islámico?
Uno de los aspectos que más ha generado controversia es la hipótesis de un ataque terrorista de carácter yihadista. La cercanía del Hotel Pattaya, que desde principios de agosto ha alojado a menores migrantes, ha hecho que algunos vinculen este hecho con el crimen. Sin embargo, fuentes cercanas a la gestión del hotel han asegurado que ninguno de los menores puede estar relacionado con el asesinato, ya que están bajo una estricta vigilancia tanto de la Guardia Civil como de asistentes sociales. Esta teoría ha sido rechazada por muchos vecinos, quienes insisten en que si el asesino hubiera sido uno de los menores, la comunidad habría reaccionado de manera muy diferente.
Bandas latinas y ritos de iniciación, otra de las hipótesis
Otra hipótesis que ha sido considerada es la de un posible rito de iniciación de una banda latina. La violencia asociada a estas organizaciones ha sido un problema creciente en muchas partes de España. Y la idea de que el asesinato de Mateo pueda estar relacionado con un acto de este tipo no es descabellada. La posibilidad de que el crimen haya sido cometido como parte de un ritual de aceptación en una banda ha sido mencionada por algunos analistas. Sin embargo, hasta ahora no hay evidencia concreta que respalde esta teoría. De hecho, no hay evidencia que respalde nada. No existe móvil para el asesinato de Mocejón. Y eso hace el crimen todavía más perturbador.