La provincia de Valencia se despierta con un panorama devastador tras el paso de una de las mayores DANA en años. Las intensas lluvias y el desbordamiento de ríos han provocado el corte de numerosas carreteras y dejado a cientos de conductores atrapados en puntos estratégicos a lo largo de la región. La Dirección General de Tráfico (DGT) ha informado que las vías más afectadas incluyen la carretera A-3, una de las arterias principales que conecta Valencia con Madrid, donde decenas de vehículos permanecen abandonados en los arcenes. La situación ha llevado a que muchos conductores deban refugiarse en estaciones de servicio o puntos seguros, ante la imposibilidad de avanzar y el riesgo de quedar atrapados en el cauce de la crecida por las carreteras cortadas.
Uno de los puntos más críticos se encuentra en la carretera A-3 a la altura de Chiva. El tráfico está totalmente bloqueado en ambos sentidos desde el kilómetro 327 al 323. Esta zona se ha convertido en un lugar de riesgo debido a la cercanía de la rambla del Poyo, un cauce que se ha desbordado e inundado los tramos adyacentes y forzando a los conductores a abandonar sus vehículos. Desde el bypass en adelante, el trayecto está lleno de vehículos de todo tipo abandonados. Las carreteras cortadas por la DGT tras el paso de la DANA no dejan de aumentar.
Así está la situación de las carreteras cortadas por la DGT tras la devastación de la DANA
Los servicios de emergencia han actuado rápidamente en coordinación con la DGT para evacuar a los ocupantes de los vehículos ante el riesgo inminente de ser arrastrados por las fuertes corrientes. Muchos fueron conducidos a puntos de refugio como la gasolinera El Pont, cercana al polígono de La Reva, donde los afectados pudieron resguardarse durante la noche. La decisión de evacuar no fue fácil, pero se volvió necesaria cuando el agua comenzó a invadir la calzada.
Los cuerpos de seguridad han advertido del peligro de intentar recuperar los vehículos sin autorización. El riesgo de que sean arrastrados sigue latente. Hasta el momento, los servicios de emergencia han desplegado equipos de rescate para evitar tragedias, aunque aún no hay un balance definitivo sobre los daños materiales ni una confirmación del número de vehículos afectados. Los esfuerzos también se centran en monitorear el nivel del agua de la rambla del Poyo, cuyo caudal ha aumentado de forma alarmante.
La DGT ha comunicado que la situación en la A-3 es solo una muestra de los efectos que la DANA ha dejado en varias comarcas valencianas. Los especialistas meteorológicos ya habían advertido de la posibilidad de fuertes lluvias, pero la magnitud de las inundaciones ha superado las previsiones. Ahora las autoridades evalúan las posibles soluciones para reabrir las vías de forma segura. Además, advierten que la DANA podría prolongarse durante las próximas horas, aumentando la incertidumbre para quienes se encuentran atrapados.