Ya estamos en un nuevo año y en él se vienen muchas novedades y cambios y van a hacer que nos cueste un poco más de la cuenta entrar en él del todo, sin embargo, mientras nos vamos adaptando y volviendo a la rutina post-navideña es importante reseñar que entre estas cosas que van a cambiar hay una que nos afecta a la gran mayoría y que tiene que ver con nuestros coches. Porque sí, el parque móvil español está envejecido y por mismo es habitual que se tomen medidas al respecto. Una veces coartando la movilidad y otras, como esta de la que vamos a hablar, para tenerlos controlados. Ese es el motivo por el que este 2025 se vienen cambios en la ITV.
Los cambios que van a hacer que la ITV sea más dura a partir de 2025
Los cambios ya están en marcha y principalmente tiene que ver con la normativa de la ITV y los trámites alrededor de ella, los cuáles se van a endurecer en relación con ciertas condiciones de obligado cumplimiento para todos los conductores. Todo en pro de cumplir con el objetivo de la inspección en sí misma, que no es otro que el de garantizar la seguridad y la sostenibilidad en la carretera.
Una de las modificaciones más relevantes en este sentido es la documentación que se deberá entregar durante el trámite, en los que antes muchas partes no se exigían con tanta dureza, pero eso va a cambiar a partir de ahora. Es por ello que a partir del año que viene deberemos presentar la Tarjeta de Inspección Técnica, el Permiso de Circulación y la acreditación del seguro obligatorio del vehículo.
También hay novedades para los conductores, puesto que estos van a tener que llevar una copia del DNI o CIF del propietario del vehículo a inspeccionar. Y será clave, puesto que presentar cualquiera de estos documentos durante el proceso puede desembocar en la suspensión del mismo, incapacitando al vehículo en cuestión. Además de ello, el conductor deberá aprobar la inspección visual y mecanizada habitual para que pueda circular por la vía pública de manera legal.
Las emisiones y sistemas de detección, a examen
Por otro lado, también se verán actualizados los términos correspondientes a las emisiones contaminantes durante el próximo año. Ya desde hace varios años, se han endurecido las evaluaciones con respecto a este elemento y ahora van a ir a más. Estas se volverán más estrictas para que las emisiones de los vehículos no respondan a niveles nocivos para el medio ambiente, especialmente en los automóviles con combustible diésel.
Revisar bien el coche antes de ir a la ITV nos puede ahorrar tiempo y dinero
No solo esto, si no que a partir del inicio del 2025, se requerirá de manera obligatoria la incorporación de sistemas electrónicos de diagnóstico en todos los vehículos. Estos será muy útiles para detectar fallos y carencias en el mismo en tiempo real, lo que facilitará a los técnicos responsables de la inspección registrar problemas que pueden resultar más complicados de percibir.
La clave será la prevención, porque para conseguir ‘pasar’ la ITV con éxito, es muy recomendable realizar una revisión de manera anticipada en la que registrar los posibles inconvenientes que puedan dificultarnos la aprobación de la misma. Además, dicha previsión puede ahorrarnos dinero y tiempo, por lo que es crucial realizar un mantenimiento de nuestro vehículo, poniendo especial atención en el estado de las luces, los frenos, los neumáticos y la suspensión, que pese a los cambios siguen siendo los que más problemas causan cada vez que toca acudir a la inspección.