El invierno muestra su lado más duro en España con la llegada de un temporal histórico. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido una advertencia de última hora confirmando la llegada de una masa de aire frío procedente del interior del continente europeo, que traerá consigo un drástico descenso de las temperaturas y nevadas generalizadas en muchas zonas del país. Este fenómeno meteorológico promete heladas, temperaturas bajo cero y una gran cantidad de nieve en varias provincias españolas.
Según AEMET, el temporal comenzará a afectar al país el domingo 12 de enero, cuando la masa de aire polar hará descender los termómetros de manera abrupta en casi todas las regiones. Aunque este fin de semana todavía se mantienen temperaturas más altas de lo habitual gracias a un anticiclón en el norte de Europa, el domingo marcará un cambio radical con la llegada del aire frío.
Las previsiones indican que las heladas nocturnas serán especialmente intensas en el interior de la mitad norte y del sureste peninsular. Por su parte, las áreas costeras y Galicia podrían experimentar temperaturas menos extremas, aunque no estarán completamente exentas del impacto del temporal.
¿Dónde puede nevar en España en enero de 2025, según AEMET?
La AEMET ha señalado que las primeras nevadas comenzarán este domingo en el noreste peninsular, especialmente en zonas situadas por debajo de los 800 metros de altitud. El lunes, las nevadas persistirán en esta región y alcanzarán cotas de alrededor de 1.000 metros en el sureste de la península. Para el martes y miércoles, las montañas del norte y este peninsular seguirán recibiendo nieve, aunque en menor intensidad.
La nieve también podría aparecer en cotas más bajas de forma puntual, especialmente en la Meseta Sur y zonas montañosas de la Comunidad Valenciana y Cataluña. Este temporal traerá consigo un paisaje invernal que afectará a gran parte del país.
A partir del domingo llegará una masa de aire frío, con un descenso térmico acusado. Habrá heladas generalizadas, incluso cerca de la costa.
A mediados de semana podrían llegar lluvias al área mediterránea y nevadas a las montañas del este, sin descartarlo en cotas más bajas. pic.twitter.com/qCTqntqi9i
— AEMET (@AEMET_Esp) January 9, 2025
El descenso de las temperaturas será uno de los aspectos más destacados del temporal. Según AEMET, muchas capitales de provincia registrarán temperaturas bajo cero, especialmente durante la noche y las primeras horas de la mañana. Entre las ciudades más afectadas estarán Burgos, Pamplona y Vitoria, que el domingo no superarán los 7 grados, mientras que Ávila, Lleida y Pamplona apenas llegarán a los 5 grados el lunes.
Las heladas más intensas se darán en Teruel, con -5 grados el domingo y hasta -7 grados el lunes. Soria también sufrirá temperaturas extremas, con -7 grados previstos para el martes. Estas cifras reflejan la severidad del temporal que está por llegar.
Heladas nocturnas y temperaturas máximas gélidas
Además de las bajas temperaturas nocturnas, las máximas también serán excepcionalmente frías. En gran parte de la mitad norte y el interior del sureste peninsular, los termómetros no superarán los 10 grados durante el día, especialmente entre el lunes y el martes. Este frío diurno intensificará la sensación térmica de invierno extremo, algo que AEMET ha calificado como “inusual para esta época”.
AEMET también advierte que la ola de frío no se limitará a las zonas montañosas y del interior. A mediados de la próxima semana, el temporal traerá lluvias al área mediterránea, que podrían convertirse en nieve en cotas bajas, afectando incluso a zonas cercanas al litoral. Las comunidades del sureste, como Murcia y la Comunidad Valenciana, podrían ver nevar en áreas inusuales, algo que añade un toque histórico a este evento meteorológico.
Por su parte, en el norte de Andalucía y Extremadura las heladas serán menos frecuentes. Sin embargo, las temperaturas seguirán siendo significativamente bajas. Galicia y la costa cantábrica, aunque menos afectadas por las nevadas, también experimentarán un descenso térmico, con un clima más estable debido a la influencia del anticiclón.