El verano en casi toda España es muy duro en lo que ha temperatura se refiere, y es que las temperaturas suben mucho y es vital tener lugares en los que hacer más ameno el calor que ataca a gran parte de la geografía patria. Una gran parte de la Península y las islas tienen la suerte de tener costa, por lo que refrescarse en esta época estival no es un problema, sin embargo, muchas otras zonas no lo tienen tan sencillo y cuando el termómetro aprieta todo se complica.
Este es el caso de Madrid, la capital, que tiene muchas cosas, en servicios, oferta cultural, deportiva, social, etc. Pero hay algo con lo cuenta, la playa. Cuando se pasan los treinta grados centígrado, algo más que habitual en la ciudad, es vital refrescarse, y aunque suene extraño, cada vez hay más lugares que favorecen hacerlo, por eso ahora vamos a destacar 10 puntos cerca de la ciudad para darse un chapuzón. Ya sean pozas, piscinas naturales, playas de interior, o cualquier lugar con agua, en verano es necesario refrescarse y en los alrededores de Madrid sobran sitios para ello.
El pantano de San Juan
Este pantano se encuentra entre las localidades de San Martín de Valdeiglesias y Pelayos de la Presa, a poco más de 60 kilómetros de la capital. Tiene dos playas en las que está permitido el baño: la playa de la Virgen de la Nueva y la playa de El Muro. La primera de ellas incluso con la bandera azul de calidad. De hecho, los madrileños la llaman ‘la playa de Madrid’, la cual tiene hasta arena en la que se puede tomar el sol, y chiringuitos alrededor. El pantano cuenta incluso con su propio puerto.
Las Berceas
El municipio de Cercedilla tiene una de las mejores piscinas naturales de la región, la de Las Berceas, que pueden parecer a simple vista unas piscinas normales, pero su agua procede de los arroyos de la zona. Y tiene una ubicación inmejorable, rodeadas de montaña y naturaleza, lo que las convierte en un enclave especial para darse un chapuzón. El aforo es de 1.750 personas, y suele llenarse, pese a costar 6€ entre semana y 7€ los fines de semana.
Las Presillas
Las aguas del río Lozoya llenan Las Presillas, una zona de baño de la localidad de Rascafría que se encuentra rodeada de presas. El conjunto está compuesto por tres piscinas naturales con vistas a Peñalara. Eso sí, sus aguas están muy frías, y solo el que sea capaz de meterse en ellas puede disfrutar de sus cascadas. El entorno está rodeado de pinos que dan sombra para hacer un pícnic o para resguardarse del sol, y también cuenta con chiringuito, kiosco, merenderos y aseos.
Calicantón
En la pequeña localidad toleada de Escalona se encuentra a playa del Calicantón, pertenenciente a las aguas del río Alberche. La playa también cuenta con una zona silvestre al otro lado del puente de piedra en la que dependiendo de la altura del caudal es posible bañarse o no. Tiene espacio para merendar y refrescarse cualquier tarde de verano.
Playa de Estremera
En el municipio madrileño de Estremera se encuentra esta “playa”, que no es un pantano, si no un paseo fluvial. Eso sí, Comunidad de Madrid reconoce esta zona como apta para el baño, aunque el color verdoso de sus aguas puede echar para atrás a más de un bañista. La playa se encuentra totalmente rodeada por árboles y naturaleza. Las actividades acuáticas son otra atractivo, y además se pueden hacer rutas en kayak.
Río Alberche
El río Alberche inunda numerosas zonas de baño de la región, aunque la más famosa es el arenal que forma junto al río Perales. Es lo más parecido a una playa que se puede encontrar en los alrededores de la localidad de Aldea del Fresno. Es la una gran opción para una escapada en familia.
Río Cambrones
El punto malo de esta zona es que las aguas del Río Cambrones están muy frías. Esta zona de baños se encuentra en Palazuelos de Eresma, una localidad segoviana. Es una opción más alejada de la región, pero merece la pena por el entorno natural en el que se encuentra.
Piscina natural de Riosequillo
En Buitrago de Lozoya está la piscina natural más grande de España, que cuenta con 4.500 metros cuadrados de extensión y su agua proviene del embalse de Riosequillo. Tiene chiringuito, pistas deportivas, área infantil para los más pequeños, vestuario, sombrillas, etcétera. Además, desde la piscina se ve la sierra de Madrid desde las alturas. Cuesta cuatro euros entre semana y cinco los fines de semana.
Embalse del Burguillo
El embalse del Burguillo es el equivalente al pantano de San Juan de Madrid, pero en Ávila. Tiene espacios para bañarse y también puerto. El inconveniente de esta playa es que carece de zonas de sombra, debido a que no hay árboles en la orilla en los que refugiarse, lo que hace imprescindible llevar sombrilla.
Lagunas de Villafranca
Se trata de una de las joyas naturales más hermosas de Castilla-La Mancha, las Lagunas de Villafranca de los Caballeros. Además de una zona de baño, tiene unos humedales que han sido declaradas Reserva de la Biosfera por la Unesco. Este reconocimiento convierte la zona en una de las de mayor importancia ecológica de Castilla-La Mancha.