A la hora de ponernos en forma o de empezar a tratar de conseguirlo tenemos muchos objetivos, ya que hay algunos que son más estéticos, mientras que otros buscan más los beneficios a nivel de salud o simplemente se lleva a cabo por ocio. Pues bien, sea cual sea el motivo principal, es algo crucial para la salud y para poder mantener un estilo de vida activo que en general nos ayude en todo nuestro día a día y en el futuro. Ya que hay algunas partes del cuerpo que si logramos fortalecer van a tener muchos usos e implicaciones en nuestro día a día que nos van a ser muy útiles.
Una de ellas es la fuerza abdominal. Es cierto que siempre se ha asociado a los abdominales como algo estético, pero más allá de eso, tener un core fuerte hace que nuestros órganos estén más protegidos, así como que suframos mucho menos en algunas actividades cotidianas. Y para trabajar esto una de las formas más útiles es sin duda con planas abdominales, las cuáles nos llevan al límite, ya que son sumamente duras, pero tienen muchísimos beneficios y es lo que se dice un sufrimiento grato. Pero, ¿cuánto tiempo tenemos que llevarlas a cabo?.
Un grupo de mujeres realizando planchas abdominales
El tiempo necesario que tenemos que realizar las planchas abdominales
Esto no es una ciencia exacta, porque se por sí hay gente que aguanta más que otra, pero es cierto que si estamos hablando de principiantes, con mantenerla entre 20 y 30 segundos se pueden conseguir resultados y es un excelente primer paso. Incluso, algunos principiantes pueden empezar notando resultados con solo 15 segundos de esfuerzo continuo, activando los músculos abdominales y fortaleciendo el core con cada intento.
Pero eso sí, según vamos avanzando, el desafío debe crecer y hay que intentar aumentar la dureza, el tiempo y los ejercicios para ir a más: por ello, para estimular al máximo el abdomen y obtener resultados visibles, es ideal sostener la plancha durante un minuto o más. Este incremento gradual en el tiempo ayudará a seguir desafiando por completo al cuerpo y a construir un core sólido. Aunque eso sí, tenemos que tener claro que la duración no es el único factor que importa; incorporar variantes de la plancha también es clave. Esto no solo ayuda a evitar la monotonía, sino que también te permite trabajar otras áreas del core y mejorar tu fuerza general.
Y la técnica que se siga también es crucial, ya que hacer una plancha perfecta durante menos tiempo siempre será más útil que aguantar mucho más pero sin conseguir la posición idónea que resta fuerza a los abdominales y reparte la carga en piernas o brazos. Por ello hay que ir poco a poco, ganando la fuerza y potencia en la zona, pero siempre primando la calidad a la cantidad.
La clave es ser constante
Las planchas son un ejercicio demandante, sí, pero que a la vez requiere poco tiempo, aunque el que sea que use haya que sufrirlo. No obstante, sí que es cierto que es bastante agradecido, por lo que si vamos trabajando día a día, cada vez un poco más, muy pronto vamos a conseguir nuestro objetivo, llegando a cotas que al principio eran muy difíciles de imaginar y cada vez aguantando más y más tiempo y con un core mucho más trabajado.