El baloncesto, uno de los deportes más populares y practicados a nivel mundial, ocupa un lugar prominente no solo en el ámbito deportivo sino también en el cultural. Sin embargo, detrás de su espectacularidad y la pasión que despierta, se esconde una realidad menos conocida pero preocupante. Se trata del deporte que provoca más lesiones en mujeres. Un estudio reciente del Instituto Nacional de Educación Física de Cataluña (INEFC) ha puesto de manifiesto esta situación, revelando cifras que no pueden ni deben ignorarse.
La prevalencia del baloncesto como el deporte que provoca más lesiones
El INEFC ha revelado que, en Cataluña, el baloncesto lidera el porcentaje de lesiones en deportes de equipo entre mujeres de 15 a 24 años. Tiene un alarmante 48%. Es, por tanto, el deporte que provoca más lesiones en mujeres. Esta cifra supera significativamente a deportes como el fútbol, que registra un 38%. Aún más revelador es que más de la mitad de estas lesiones ocurren durante los entrenamientos, no en competiciones. Lo que sugiere problemas en las prácticas de preparación física y preventivas.
Las causas de esta alta incidencia de lesiones son muchas y muy variadas. Las diferencias biomecánicas y fisiológicas entre géneros, como la mayor laxitud ligamentosa en mujeres, aumentan el riesgo de lesiones en ligamentos. Especialmente, en tobillos y rodillas, articulaciones extremadamente exigidas en el baloncesto. Además, las fluctuaciones hormonales asociadas al ciclo menstrual pueden alterar la estabilidad articular y la respuesta muscular, incrementando la vulnerabilidad a lesiones durante ciertas fases del ciclo.
La importancia de la preparación física integral
El estudio subraya la necesidad crítica de que los clubes deportivos implementen programas de entrenamiento específicos y efectivos en prevención de lesiones. La falta de una preparación física adecuada y especializada es uno de los principales factores detrás de la alta tasa de lesiones en el baloncesto femenino. Es imperativo que los entrenamientos sean diseñados teniendo en cuenta las necesidades específicas de las mujeres deportistas. Eso incluye ajustes durante los diferentes periodos del ciclo menstrual.
Programas como ITW Sport están marcando la pauta en la implementación de enfoques integrales y especializados hacia la preparación física femenina. Estos programas no solo se centran en mejorar el rendimiento atlético, sino que también ponen un énfasis crucial en la prevención de lesiones. A través de entrenamientos específicos y técnicas de rehabilitación avanzadas, estos programas pretenden minimizar los riesgos asociados al baloncesto y otros deportes de alto impacto.
Desafíos y soluciones
Uno de los mayores desafíos es la falta de conciencia sobre la importancia de programas de entrenamiento especializados para mujeres. La educación de entrenadores, jugadores y todos los stakeholders en el mundo del deporte es fundamental para cambiar la percepción de que un solo tipo de entrenamiento sirve para todos. Las diferencias en la fisiología y biomecánica de las mujeres deben ser consideradas para crear entornos deportivos más seguros y efectivos.
Las federaciones y las asociaciones deportivas tienen la responsabilidad de promover políticas que fomenten la igualdad y la seguridad en el deporte. Esto incluye la implementación de reglas que requieran de los clubes deportivos la adopción de programas de entrenamiento y prevención de lesiones que estén científicamente validados y adaptados a las necesidades específicas de las deportistas femeninas.