El grado de positivismo o pesimismo con el que afrontemos nuestro día a día puede definir claramente si las cosas que nos ocurren son buenas o malas. Ciertamente, nada es blanco o negro, sino que una gran paleta de colores se encuentran en medio de estos dos lados opuestos. Algo así intenta explicar el doctor Mario Alonso Puig cuando hace referencia a aquella famosa cita de “somos nosotros cuando nos caemos los que al hablarnos determinamos si hemos caído en un bache o en una tumba”.
Gestionar adecuadamente nuestras emociones, el gran reto del siglo XXI
Aprender a hablarnos con respeto es esencial si queremos cosechar éxitos en nuestra vida. Claro que para ello necesitamos primeramente aprender a comprender nuestras emociones y lo más difícil de todo: saber gestionarlas.
El cirujano, conferenciante y escritor Mario Alonso Puig subraya la relevancia de entrenar la mente para fomentar el optimismo y afrontar los retos diarios. En una entrevista reciente en el programa Herrera en COPE, Puig destacó la influencia fundamental de los pensamientos en nuestra salud tanto física como mental. Para ilustrarlo, utilizó el ejemplo de una película famosa para demostrar cómo nuestras emociones impactan en nuestras decisiones y comportamientos.
Puig explica la gran conexión entre mente y cuerpo
Según explica el doctor Puig, “hay personas que nacen con una mayor apertura al riesgo, a la incertidumbre y a probar cosas nuevas, y hay personas que tienen una mayor aversión a ese riesgo”.