Cuando una amiga se convierte en madre, lo primero que queremos es correr a celebrar con ella y conocer al bebé tan esperado. Sin embargo, después del parto, las mujeres suelen sentirse abrumadas y agotadas. En ese momento, lo que más desean los padres es tranquilidad. Aun así, el apoyo de los seres queridos es fundamental durante la maternidad, y es posible estar allí para una amiga sin llegar a ser una molestia.
Ayudar a una amiga en el posparto es una forma significativa de ofrecer apoyo emocional, físico y práctico durante un momento que puede ser tanto hermoso como desafiante. El posparto es un periodo en el que las mujeres atraviesan una montaña rusa de emociones, cambios físicos y adaptación a la nueva vida con el bebé.
Estas son algunas sugerencias sobre cómo puedes ser un buen apoyo para tu amiga en esta etapa tan delicada.
Evita visitarla al hospital
Es importante considerar que recibir visitas inmediatamente después del parto puede ser incómodo para la madre. Si ella no te ha solicitado acompañarla en el hospital, lo mejor es evitar ir. El personal médico se encargará de atender todas sus necesidades en ese momento.
Llévale comida
La llegada del bebé mantendrá a los nuevos padres muy ocupados, incluso durante la noche. Si deseas ayudar a tu amiga mamá, una buena opción es llevarle comida preparada. Así les ahorrarás el tiempo que les tomaría ir al supermercado o cocinar.
Puedes comprarle algo de su restaurante favorito o prepararlo tú misma. Lo ideal es elegir platos que puedan guardarse en la nevera, calentarse fácilmente y comer en cualquier momento.
Ayuda con las tareas de casa
La nueva madre puede sentirse agotada por la falta de sueño, la alimentación del bebé y los cuidados constantes que necesita. Tu apoyo en las tareas del hogar será invaluable.
Ofrecerte a limpiar su casa o hacer tareas domésticas como lavar los platos o las ropas del bebé puede aliviar mucho su carga. Evita esperar a que te pida ayuda, ya que puede estar demasiado ocupada o sentirse culpable por pedirla.
Una de las mejores maneras de ayudar es preparar comidas caseras y saludables que pueda calentar fácilmente. Las mujeres en posparto a menudo no tienen tiempo para cocinar o se olvidan de comer bien mientras se centran en el bebé.
Si tu amiga tiene más hijos, ofrecerte para cuidarlos o llevarlos a actividades también puede ser de gran ayuda.
Ofrécete para cuidar al bebé
Los cuidados de un bebé recién nacido requieren toda la atención de los padres, lo que deja a la mamá sin tiempo para sí misma.
Por eso, cuando la visites, ofrece tu ayuda con el bebé en la medida de lo posible. De esta manera, ella podrá tomar un baño relajante, peinarse, descansar un rato o simplemente hacer lo que necesite para sentirse mejor.
El autocuidado en el posparto es fundamental, ya que ayuda a la madre a sentirse más descansada, con un mejor estado de ánimo y mayor autoestima.
Evita opinar o hacer juicios indeseados
Es común que, con la llegada de un bebé, los familiares y amigos den su opinión o critiquen lo que consideran mejor para el recién nacido. Esto puede resultar incómodo para las madres, especialmente en los primeros días después del parto.
Por eso, si quieres ayudar a tu amiga mamá, es importante evitar dar opiniones sobre la crianza del bebé, a menos que ella te las pida.
También es recomendable no hacer comentarios sobre su cuerpo o su apariencia. Es normal que estos aspectos no estén en su mejor momento durante el posparto, y cualquier comentario al respecto podría hacer que se sienta mal consigo misma.
Regálale cosas útiles y necesarias
Cuando quieras hacerle un regalo a tu amiga que acaba de ser mamá, lo mejor es llamarla y preguntarle qué necesita. Evita regalarle ropa que no esté acorde a la temporada o adornos que puedan ocupar espacio innecesario, como peluches grandes o portarretratos. A veces, los regalos más prácticos, como un paquete de pañales, biberones o protectores de lactancia, son los más útiles y apreciados.
Habla con ella y escúchala
Las emociones de la madre durante el posparto pueden ser muy fluctuantes. Es completamente normal que pase de sentir una gran felicidad a experimentar tristeza, miedo o preocupación. Por eso, el apoyo emocional de los seres queridos es fundamental.
Cuando hables con ella, pregúntale cómo se siente, escúchala con empatía y ofrécele todo el apoyo que puedas. Además, recuérdale que está haciendo un excelente trabajo como madre.
Consiéntela
Cuando la mamá ya se haya recuperado completamente del parto, coordina con el papá para que se encargue del bebé por un par de horas. Así podrás llevarla a su restaurante favorito, a un salón de belleza o a dar una caminata por el parque. El objetivo es que ella pueda tomar un merecido descanso del hogar y de la rutina de la crianza.
Ponte a su disposición para lo que necesite
Además de lo mencionado, ofrécele tu ayuda para tareas como ir a la farmacia, hacer trámites o pagar cuentas. Aunque parezcan simples, las tareas cotidianas pueden consumir mucho tiempo, especialmente cuando se cuida a un recién nacido.
No olvides tu propio bienestar
Finalmente, recuerda cuidar también de ti misma para poder brindar apoyo a tu amiga de manera efectiva. Si bien ser una amiga comprensiva y solidaria es fundamental, es importante que no descuides tus propias necesidades emocionales y físicas.