Caso Begoña Gómez

Un sector del PP apoya “sondear” la viabilidad de una moción de censura

Feijóo entiende que la legislatura está agotada y pide a Sánchez que convoque elecciones. “¿Moción de censura? Difícil, aunque cosas más raras hemos visto”, responde un barón

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, preside la reunión de los grupos parlamentarios del Partido Popular, Congreso, Senado y Parlamento europeo y de la dirección nacional este miércoles en el Hemiciclo antiguo del Senado. EFE/ Daniel Gonzalez

Alberto Núñez Feijóo quiere al Partido Popular en tensión, aunque con el calendario en la mano quede mucho para otras elecciones generales. A sus diputados y senadores, les pidió estar “preparados” ante el posible “colapso” de la legislatura. “Puede llegar en cualquier momento”, avisó a navegantes. Un diagnóstico idéntico al que recientemente trasladó a sus barones territoriales. “Esto no da más de sí”, sentenció Feijóo, tras comprobar el nuevo golpe de Junts a Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados.

“Elecciones ya”, es el mantra del jefe de la oposición. Para la dirección nacional, Sánchez está acorralado por la “corrupción” que le rodea y es incapaz dar estabilidad a la legislatura. Si bien, ante sus parlamentarios, Feijóo rehusó retar al presidente a que se someta a una cuestión de confianza ni tampoco planteó la opción de una moción de censura. El ocaso del presidente puede llegar “más pronto que tarde” pero “no depende de nosotros”, dijo este martes en el Senado.

Para un sector del PP, armar el puzzle de la moción no es algo descabellado. “¿Por qué no se puede sondear esa opción?”, en palabras de un alto cargo, que sí reconoce su dificultad, toda vez supondría una negociación de Génova con Junts, el partido de Carles Puigdemont. “Aquí la pregunta es si Puigdemont quiere dejar caer de verdad a Sánchez”, añadía, después de que este haya votado en contra del techo de gasto -paso imprescindible para la aprobación de los Presupuestos Generales- y la toma en consideración de la reforma de la ley de extranjería.

En puridad, el PP de Feijóo ya inició contactos con Junts, pero el conocimiento público de estos generaron una enorme controversia de puertas para adentro. “Que yo sepa, algunos compañeros han tenido contactos con Junts, pero jamás han negociado”, afirmó el líder del PP en una entrevista en Okdiario. Entre ellos, entabló ese diálogo Esteban González Pons, según acabó reconociendo. El vicesecretario llegó a afirmar que Junts es “un partido cuya tradición y legalidad no está en duda”.

En este sentido, hay una parte del PP que considera “viable” tantear a Junts para saber “en qué punto están” sin “renunciar en ningún caso a nuestros principios”, según la reflexión de un destacado diputado. “¿Vox votaría en contra de echar a Sánchez si se logra la suma?”, se preguntaba.

La cuestión genera un importante debate interno. La opción de liderar una moción de censura es descartada por muchos cargos cuando se le pregunta por ello. “Con Junts, más allá de la cortesía parlamentaria, ni agua”, responde gráficamente un dirigente de la estructura madrileña, que recuerda las recientes manifestaciones de la formación contra la cesiones de Sánchez a los independentistas. ¿Pactar con Junts es una línea roja? “Sí”, replica un importante sector del PP.

La mayoría de barones consultados por Artículo14 responden que “no” dan los números para una moción de censura, aunque uno añade: “Es difícil, no creo que Abascal nos diera esa baza, aunque cosas más raras hemos visto”. “Lo que tenemos que hacer es armar una alternativa sólida. Sánchez no se va a ir”, en palabras de un presidente con mando en plaza. “Se va a atornillar en la Moncloa”, según el diagnóstico de un tercer líder autonómico.

Hace escasas semanas, Pepe Luis Vázquez preguntó expresamente a Feijóo por una posible moción: “Junts va a hacer lo que le interesa a Junts, no lo que le interesa a España. Y yo voy a hacer lo que le interesa a España. No sé si eso puede confluir. Lo que sí digo es que yo sé que no tengo votos para que prospere una moción, pero tengo una responsabilidad. La Constitución me otorga un instrumento legal. De la misma foto que no tenemos los votos para sacar la moción, no renunciamos a plantearla en el momento que consideremos oportuno”, dijo en El Español.

Esto es, no cierra la puerta, aunque deja ver la enorme dificultad para sacarla adelante. De momento, el jefe de la oposición se centra en desgastar a Sánchez, dando por finiquitada la legislatura tan solo un año después de las elecciones generales. “Esto no es un Gobierno, es un tinglado (…) Sánchez solo tiene capacidad para bloquear la alternativa. Es el tapón para el cambio que requiere nuestro país. Le pido que llame al jefe del Estado para decirle que convoca elecciones o que se va”, sentenció.