“Lo que ocurrió ayer no puede volver a pasar jamás”. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha prometido este martes que el Ejecutivo “va a llegar hasta el fondo” para explicar el insólito apagón que el lunes dejó sin electricidad a buena parte de la Península Ibérica sin que fuera posible retornar a la normalidad hasta la mañana siguiente.
En su tercera comparecencia desde el inicio de la crisis (12.30 horas del día anterior), el presidente no ha querido descartar que el apagón fuera causado por un ciberataque, como sí ha desechado Red Eléctrica. Pide no “descartar ninguna hipótesis”, porque sería “imprudente” hacerlo.
Como también lo sería formular un diagnóstico a día de hoy, cuando aún hay tantas variables por monitorizar. “El sistema eléctrico es de enorme complejidad”, el volumen de datos es “ingente” y “se necesita tiempo para tener un análisis claro y certero, dijo”. Para su “análisis independiente” prevé utilizar “todos los resortes” del Estado, y actuar “sin prisas”: “Pueden ser malas compañeras”, previno.
Por lo pronto, advierte de que el Ejecutivo responderá con “reformas”, pero también exigirá “todas las responsabilidades pertinentes a los operadores privados”, “si las hubiera”. No excluía de esta categoría a Red Eléctrica, cuyo 20% es propiedad de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), mientras que el 80% restante está en manos de capital privado.
De hecho, después de haberse reunido en varias ocasiones con Red Eléctrica, y hasta de constituir el primer gabinete de crisis en su sede, el lunes, Sánchez asegura haber conocido por los medios de comunicación que el organismo que preside Beatriz Corredor entierra la hipótesis del ciberataque.
Minutos antes, la Audiencia Nacional había anunciado la apertura de diligencias para aclarar si el apagón obedece a un sabotaje informático y si podría considerarse un ataque terrorista. El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) y el Centro Criptológico Nacional (CCN) examinan ya los registros de Red Eléctrica y los operadores privados “para no descartar ninguna hipótesis”.
Comisión de investigación, acceso a reservas de petróleo y comparecencia parlamentaria
Por su parte, Sánchez ha informado de la creación de una comisión de investigación en el marco del Consejo de Seguridad Nacional. La liderará el Ministerio de Transición Ecológica, y que contará con la participación de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). También reclamará un informe “independiente” a Bruselas.
El Consejo de Ministros ha aprobado liberar tres días de reservas estratégicas de productos petrolíferos, para garantizar el suministro de los grupos electrógenos que garantizan la energía a hospitales y edificios como los ministerios.
Y el presidente prevé utilizar su comparecencia en el Congreso de los Diputados el 7 de mayo, convocada para hablar de la crisis arancelaria, para desgranar también la respuesta del Ejecutivo a la “crisis energética”, que sigue declarada hoy.
Sánchez ha comunicado que algunas de las 8 comunidades autónomas que pidieron al Gobierno que tomase las riendas de la gestión de la emergencia ya han reclamado que desactive el nivel 3 de alerta.
El jefe del Ejecutivo ha asegurado que el país “está superando lo peor” de la crisis, y ha negado que el corte de luz esté relacionado con la reducción de la potencia generada por las centrales nucleares. “Si hubiésemos tenido mayor dependencia nuclear, la recuperación no habría sido tan rápida como la que estamos viviendo”. En vez de ser solución, dijo, “las centrales nucleares han sido un problema”.