El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, sorprendió a todos ayer al aparecer en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados con un cambio significativo en su imagen: no llevaba sus habituales gafas. Esta transformación, que rápidamente captó la atención de los medios y el público, ha generado preguntas sobre las razones detrás de su nuevo aspecto y lo que podría implicar para la imagen pública de uno de los líderes políticos más destacados de España.
Aunque el detalle más comentado fue la ausencia de gafas, la realidad es que Feijóo ha pasado recientemente por un proceso quirúrgico ocular. Eso explica este cambio en su apariencia. A principios de octubre, el dirigente del Partido Popular se sometió a una operación de cataratas en el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega de Oviedo. Una intervención que parece haber sido un éxito y que ha dejado ver al líder popular renovado y sin necesidad de sus emblemáticas gafas, al menos por ahora.
Operación de cataratas: el origen del cambio de look de Feijóo
Feijóo, de 62 años, ya había acudido a consultas oftalmológicas durante el verano debido a problemas en su visión, concretamente por un desprendimiento de retina. Esto lo llevó a someterse a varios procedimientos médicos. Entre ellos, la mencionada operación de cataratas, una afección ocular que provoca una opacidad en el cristalino del ojo, dificultando la visión clara y nítida.
El proceso de intervención quirúrgica para las cataratas es relativamente común. Especialmente, en personas mayores de 60 años. La operación consiste en retirar el cristalino dañado y sustituirlo por una lente artificial. Como resultado, muchos pacientes experimentan una mejora significativa en su visión, eliminando en algunos casos la necesidad de usar gafas de forma permanente. Esto podría ser lo que ha permitido a Feijóo prescindir de sus gafas, al menos temporalmente. Sin embargo, no se ha confirmado si esta decisión es definitiva.
El poder simbólico de las gafas
Para muchos políticos, las gafas son más que una simple herramienta para mejorar la visión. Pueden ser una parte de su identidad visual, y también un símbolo de autoridad. En el caso de Feijóo, sus gafas se habían convertido en un rasgo distintivo de su carácter. Le otorga una imagen de seriedad y profesionalismo. En un entorno como el de la política, donde la percepción pública juega un rol crucial, cualquier cambio en la imagen de un líder puede tener repercusiones en cómo es visto por el electorado.
La decisión de Feijóo de aparecer sin gafas en un momento tan visible como la sesión de control al Gobierno fue interpretada por algunos analistas como una declaración de renovación, tanto en lo personal como en lo político. Si bien la ausencia de gafas podría ser simplemente una consecuencia de su reciente operación, el impacto simbólico de este cambio no puede ser subestimado.
En términos de imagen política, los líderes suelen ser muy conscientes de cómo los pequeños detalles pueden influir en la percepción pública. Políticos como el expresidente estadounidense Franklin D. Roosevelt, que siempre fue fotografiado sentado para ocultar su discapacidad, o Angela Merkel, conocida por sus blazers de colores sobrios, son ejemplos de cómo los líderes cuidan cada aspecto de su imagen para transmitir mensajes sutiles pero poderosos.