En las últimas horas, el término aforamiento ha resurgido con fuerza en los medios a raíz del caso de Alvise Pérez, un controvertido agitador político en las redes sociales que acaba de conseguir tres escaños en las Elecciones Europeas. La inmunidad parlamentaria de la que gozan ciertos cargos electos ha sido objeto de debate y controversia. Especialmente, cuando se percibe que este privilegio puede ser utilizado como una vía de escape ante posibles responsabilidades legales. Este es el caso del propio Luis ‘Alvise’ Pérez, quien ha reconocido públicamente que se presentó a los comicios europeos con su partido ‘Se Acabó la Fiesta’ con el único propósito de usar el aforamiento para evitar los casos judiciales que tiene por delante. Pero ¿qué es realmente este privilegio? ¿Cómo funciona en Europa?
¿Qué es el aforamiento de un eurodiputado?
El aforamiento es un privilegio jurídico que concede inmunidad a ciertos cargos públicos. Les permite desempeñar sus funciones sin el temor de ser perseguidos judicialmente por actos. Sin embargo, estos deberían estar relacionados con su labor parlamentaria. En el caso de los eurodiputados, esta inmunidad se manifiesta de manera particular debido a la naturaleza transnacional de sus funciones y a la estructura legal de la Unión Europea.
Los eurodiputados, como representantes electos del Parlamento Europeo, disfrutan de inmunidad parlamentaria en el ejercicio de sus funciones. Esta inmunidad incluye dos aspectos fundamentales:
- Inmunidad durante el mandato: Los eurodiputados no pueden ser detenidos ni procesados por las opiniones expresadas o los votos emitidos en el ejercicio de sus funciones parlamentarias.
- Inmunidad territorial: En su propio país, los eurodiputados tienen las mismas inmunidades que los parlamentarios nacionales. En otros Estados miembros de la Unión Europea, no pueden ser detenidos ni procesados, salvo en casos de flagrante delito.
¿Para qué sirve este privilegio político?
El aforamiento tiene como principal objetivo garantizar la independencia y la libertad de acción de los parlamentarios. Los protege de posibles presiones externas que puedan surgir de procedimientos judiciales. En el contexto del Parlamento Europeo, este privilegio es esencial para mantener la integridad y la eficacia del proceso legislativo a nivel continental.
No obstante, el aforamiento no es un escudo absoluto contra la justicia. Existe un mecanismo específico para el levantamiento de esta inmunidad. El Parlamento Europeo puede levantar la inmunidad de un eurodiputado si así lo solicita una autoridad judicial nacional y si se considera que la petición es legítima. Este procedimiento implica una evaluación cuidadosa por parte de la Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento, que revisa la solicitud y formula una recomendación al pleno del Parlamento. La decisión final se toma por mayoría simple de los votos emitidos.
Este mecanismo de levantamiento de la inmunidad asegura que los eurodiputados no utilicen el aforamiento como una herramienta para eludir la justicia de manera arbitraria. Sin embargo, la percepción pública sobre el uso de este privilegio puede variar considerablemente. Especialmente, en casos controvertidos como el de Alvise Pérez. El líder de ‘Se Acabó la Fiesta’ ha manifestado que solo se presentó a las Elecciones Europeas para hacer uso de este privilegio político. Por lo tanto, la Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento lo tendría fácil si se da el caso.