“Nos gusta que los ministros se quiten el pijama sin saber lo que va a pasar cuando lleguen al Congreso”. Se frotaban las manos fuentes de Génova este miércoles poco antes del arranque de la sesión extraordinaria. Félix Bolaños había saltado de la cama esa mañana para ir a una entrevista en la Cadena SER. En los micrófonos reconoció que había que esperar a la votación: “Estamos poniendo el foco en los siete diputados de Junts, pero yo pondría el foco en los 350 diputados que tiene la cámara”.
Al final la cosa acabó como acabó e inmediatamente el Gobierno pasó a querer poner el foco en el PP. Los populares por su parte trataron de escapar del haz de luz de la culpabilidad y cuatro días después seguimos en lo mismo. Nadie quiere pagar los platos rotos que quedaron tras la caída del Ómnibus. Tanto socialistas como populares son conscientes del enorme revuelo que se ha generado entre los pensionistas y también entre los usuarios del transporte público.
Artículo14 ya informó de las dudas que surgieron en las diferentes baronías del partido de Feijóo, pero la incertidumbre no es exclusiva de Génova 13 y satélites. También hay diputados, líderes regionales y cargos socialistas que no terminan de ver claro que Moncloa haya ganado la pelea por el relato.
El PP se ha puesto en modo hiperactivo; presentó decretos parche el mismo día que votaba en contra del Ómnibus, rompió relaciones parlamentarias con el Gobierno, amenaza con movilizaciones, presentarán una moción en el Senado para que Sánchez convoque un Consejo de ministros extraordinario, e incluso ha habilitado una web para recoger firmas. Frente a este despliegue Moncloa dejó caer que esperará unos días para actuar, esperando a que cale la idea de que Feijóo votó en contra de los pensionistas: “Tienen que ser conscientes del dolor que han causado”, ha dicho el presidente.
Miedo a perder el relato
Esta estrategia de dejar a Junts y PP cocerse en su jugo no termina de convencer a todo su entorno donde hay voces que alertan de que la maniobra es peligrosa; “las Comunidades del PP han corrido para bonificar por su cuenta el transporte, culpándonos de lo ocurrido, poniéndose la medalla y no podemos dejar que esa idea triunfe porque ya vamos muy justos en los territorios”. Un diputado regional muestra su preocupación porque los populares usen todo el poder de sus ejecutivos autonómicos para hacer triunfar el argumentario de Génova.
Está en la mano de Sánchez y su gabinete darle la vuelta a la situación pariendo nuevos decretos diferenciados. Es lo que reclaman el PP y Junts, que dicen que votarían sí sin dudar a textos que sólo plantearan la subida de las pensiones, los abonos de transporte a precio reducido y las ayudas para la DANA. Los socios además también aprietan; exigen con urgencia que se revierta la situación. Podemos, Bildu o BNG exigirán un decreto urgente con estas medidas, según deslizan fuentes de las tres formaciones. Hasta Sumar pide no retrasarse en la respuesta por miedo a que al final lo del Ómnibus erosione al Gobierno.
El PSOE dice ahora que no es tan fácil lonchear los decretos y que hay muchas medidas que no quieren dejar caer, apela por ello a la empatía de los populares. Ambos partidos son presa de la incertidumbre y se pondrán esta noche el pijama sin saber qué va a ocurrir con las pensiones cuando empiece esta semana.