“Es casi el principio de una amistad”. Así de entusiasta se mostró el vicesecretario de Relaciones Institucionales del PP, Esteban González Pons, tras cerrar el acuerdo con el ministro de Justicia, Félix Bolaños, para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
El guiño a Humphrey Bogart del eurodiputado del PP es toda una declaración de intenciones. El pacto para nombrar a los veinte vocales del CGPJ tras más de cinco años bloqueado es el primero en hacerse público, pero no el único, según han trasladado desde el equipo de negociación a Artículo14. Este periódico ya adelantó que desde Moncloa se pretendía que los cambios relacionados con la Justicia estuvieran dentro de una negociación más amplía.
En los próximos días se llevarán a cabo nombramientos en instituciones como la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el Banco de España y Radio Televisión Española, que se han negociado en paralelo con el CGPJ. Los tres primeros están prácticamente cerrados, y en el caso del tercero quedan “algunos flecos” ante una de las exigencias de los populares para el nuevo Consejo.
Nombres para RTVE
El ente público tiene pendiente la actualización de los cinco consejeros cuyo mandato expiró en marzo. Se trata del representante propuesto por el PSOE, Ramón Colom; el del PNV, Juan José Baños; y los tres del PP, Jenaro Castro, Carmen Sastre y Consuelo Aparicio.
Los populares ya han dado sus nombres entre los que está Eladio Jareño, que ha estado relacionado con el ente público desde 2014 donde ejerció como director de TVE hasta 2018. También volvería, José Manuel Peñalosa, que fue presidente interino en hace diez años en sustitución de Leopoldo González Echenique.
El tercero se prevé que sea una mujer aunque se especuló que Génova podría aprovechar la experiencia de su responsable de Comunicación, Luis de la Matta, para ocupar la vacante. El periodista ha sido miembro del Consejo de Administración de la televisión pública gallega. Desde la dirección del partido descartan este movimiento.
Queda también por designar al sustituto del renunciado presidente, José Manuel Pérez Tornero, que dimitió tras las presiones sufridas desde La Moncloa por el descontento de Pedro Sánchez con su línea editorial. Tornero fue llamado a capítulo en varias ocasiones antes de su salida de la cadena.
El actual consejo de RTVE es un polvorín con Concepción Cascajosa al frente de forma interina tras la dimisión de Elena Sánchez por el contrato millonario de David Broncano para competir en la próxima temporada con el espacio de Atresmedia “El Hormiguero”. Su nombramiento tiene una vigencia de seis meses por lo que expiraría el 27 de septiembre.
En el Banco de España, desde el pasado 11 de junio, su ‘número dos’, Margarita Delgado, ejerce la máxima responsabilidad en funciones, pero su mandato finaliza el próximo 11 de septiembre. De ahí, que la intención del Ejecutivo fuese cerrar antes de las vacaciones de verano el nombramiento del nuevo gobernador o gobernadora.
El mandato del presidente y vicepresidenta de la CNMV, Rodrigo Buenaventura y Montserrat Martínez, respectivamente, concluye el próximo 15 de diciembre después de cuatro años. A partir de ahora, con la entrada en vigor de la nueva Ley de los Mercados de Valores de marzo de 2023, la duración de ambos mandatos será de seis años y podrían ser renovados por dos años más, según está previsto en la norma.
Está también pendiente la renovación del Consejo de la CNMC, que es el órgano colegiado de decisión del organismo y está compuesto por diez miembros, nombrados por el Gobierno a propuesta del Ministro de Economía. En la actualidad, está integrado por su presidente, Cani Fernández, un vicepresidente -vacante en estos momentos-, y ocho consejeros, de los cuales dos cargos están también sin nombrar.
En clave política el entendimiento entre los dos grandes partidos es una excepción y queda por ver si la declaración de “amistad” va más allá o se vuelve al tono bronco. Alberto Núñez Feijóo es quién más tiene que perder en clave de relato, pero desde su equipo aseguran que al gallego “no le tiembla el pulso cuando tiene que decir que sí o que no”. El líder del PP ha vuelto ha su perfil de hombre de Estado. No ha escuchado al ala dura del PP que, en línea con Vox, pedía poner tierra de por medio con Sánchez. A Moncloa le incomoda más esta oposición. Están más cómodos en el frentismo.