La estrategia de Moncloa

¿Qué hay detrás del nuevo lema de Sánchez? “Es un mensaje muy populista”

Los politólogos Lluís Orriols y Gema Sánchez analizan para Artículo14 las frases que componen la nueva estrategia comunicativa desplegada por el Gobierno ante los aranceles

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
EFE

“Compra lo tuyo. Defiende lo nuestro”. “Nuestros valores no están en venta. Nuestros productos, sí”. El Gobierno de España no ha dudado en protagonizar una nueva y singular estrategia comunicativa tras la guerra arancelaria promovida por Donald Trump. Además del discurso de Pedro Sánchez, llamó la atención un vídeo en el que se mostraban imágenes de agricultores, constructores, investigadoras o campos de cultivo mientras una voz en off pronunciaba las citadas frases.

 

Ahora bien, ¿qué hay detrás de estas palabras? Para Gema Sánchez, politóloga y profesora en la Universidad Complutense de Madrid, “es un mensaje muy populista”. “Y muy populista de derechas”, agrega. La docente expresa que, ante este nuevo escenario generado por la imposición de tarifas a la Unión Europea, el presidente del Gobierno se enfrenta a un “problema”. ¿Cuál? Aquí la politóloga destaca sobre todo a las personas que componen el campo español, las cuales votan mayoritariamente al centro derecha y a la derecha más conservadora. Sin embargo, añade, es ahí donde Sánchez puede hacer efectivo el refrán A río revuelto, ganancia de pescadores.

Debido a que la formación liderada por Santiago Abascal comparte con Trump una visión económica proteccionista, que en el caso del presidente estadounidense no será beneficiosa para los productos españoles, el PSOE y su líder intentan con esta estrategia conseguir apoyo en un sector en el que “no tienen un gran feudo de votos”. “Si el agricultor ve que no se le defiende, buscará a otro que sí que lo haga”, subraya la profesora de la UCM. Eso sí, esto no se traduce en un respaldo automático al jefe del Ejecutivo. “En absoluto. Ni mucho menos significa que todos le vayan a votar”, remata.

“Guiño a la izquierda”

Por el contrario, Lluís Orriols, politólogo y profesor de la Universidad Carlos III de Madrid, señala que el mensaje desplegado por Pedro Sánchez es más un “guiño a la izquierda”. Orriols opina que los mencionados lemas priorizan la promoción de las políticas compensatorias sobre la cuestión nacional.

Más concretamente, el docente indica que de estas frases se desprende que “existe Estado, así como que hay un Gobierno que está presente cuando los ciudadanos necesitan ayuda”. Es decir, que el Ejecutivo es un “colchón” para que no se queden atrás aquellos que sufren. “El mensaje principal no es nacionalista, sino que es típicamente de izquierdas. Es un mensaje de que el Estado va a intervenir y va a inyectar dinero para hacer políticas contracíclicas”, afirma.

Aun así, el profesor de la UC3M admite la presencia de “aromas” nacionalistas en los lemas, aunque con la finalidad de contraponerse a una agresión exterior -los aranceles- que “ataca nuestra forma de vivir, nuestra manera de entender el mundo y cómo configuramos nuestras políticas internas”. “El mensaje de defensa no es solo de los productos españoles, también lo es de la forma de entender la democracia”, incide Orriols.

La convocatoria electoral

Sobre las intenciones que hay detrás de este mensaje, la convocatoria electoral, según Gema Sánchez, no es una de ellas. La politóloga defiende que al líder del Ejecutivo no le interesa iniciar un proceso electoral porque no tiene un apoyo suficiente para ello y porque se desconocen las consecuencias que dejará este conflicto económico.

La docente dice que, si bien la UE ha aparecido unida contra un adversario común en la primera fotografía, tendrá que verse cómo afectan las tarifas a cada país miembro al cabo de un tiempo. “Eso se te puede volver en contra”, agrega.

Lo que sí señala la profesora de la UCM con respecto a unos futuribles comicios es que en caso de que el gobernante apacigüe, en un primer momento, el impacto negativo de los aranceles, este se podría “arriesgar” y “lanzarse” a esas elecciones, ya que este escenario le podría beneficiar.

Sin embargo, matiza la politóloga, durante el prolongado tiempo que dura una campaña electoral y durante el cual queda disuelto el Parlamento, “la tortilla puede darse la vuelta”. Es decir, habría un espacio temporal más que suficiente para que se disolviera ese primer éxito que podría suponer el amortiguamiento del impacto arancelario. “Si se empieza a ver que hay recesión económica, que suben las hipotecas o los tipos de intereses, no es el mejor escenario para meterte en una campaña electoral”, expresa.

Por otro lado, esta estrategia desplegada por el Ejecutivo podría ser un escenario premonitorio. Pese a que el presidente del Gobierno “quiere terminar la legislatura, también es consciente de que la tiene complicada“. La profesora de la UCM precisa que los acuerdos con los partidos nacionalistas e independentistas que Pedro Sánchez consigue en el Congreso son “cambiantes”, y que, en un momento determinado, “se puede ver abocado a convocar elecciones”.

Situación de “adversidad”

Orriols, por su parte, subraya que cualquier situación que genera crisis económica, recesión o inflación, perjudica a los gobiernos. “Sabemos que cuando hay situaciones adversas, los gobernantes lo pasan mal electoralmente”. En este sentido admite que la situación de “adversidad” a la que el Ejecutivo se tiene que enfrentar con motivo de los aranceles impuestos por Trump “no son buenas noticias”. Ahora bien, los gobiernos, “sobre todo de izquierdas”, pueden amortiguar ese coste electoral cuando son proactivos en políticas compensatorias, argumenta el profesor de la UC3M.

Sin embargo, el politólogo dice que es “más complicado” obtener réditos electorales, o algún tipo de beneficio, de estas políticas compensatorias. “Podría ocurrir que la gente vea que hay una buena gestión, y acaben premiándote por ello. Pero las adversidades normalmente no suelen ser buenas noticias para quienes gobiernan“, matiza.

TAGS DE ESTA NOTICIA