LA NUEVA SEGURIDAD

Parlon, la alcaldesa que resucitó a los serenos para proteger a las mujeres

La consellera de Interior, clave en el ascenso del president dentro del PSC, ha hecho carrera como alcaldesa de Santa Coloma de Gramanet. Sus medidas no han dejado indiferente a nadie

La consellera de Interior, Núria Parlon, y el todavía comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Eduard Sallent
La consellera de Interior, Núria Parlon, y el todavía comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Eduard Sallent Efe

El anuncio de un fichaje estrella para ocupar un cargo en el gobierno es un clásico de las campañas electorales. Salvador Illa solo hizo un avance en este sentido cuando comunicó que, si se convertía en presidente de la Generalitat, convertiría a Núria Parlon en consellera de Interior. ¿Por qué Illa tenía tan claro la persona y la responsabilidad que iba a darle a la que ha sido alcaldesa de Santa Coloma de Gramanet (Barcelona) desde 2009 hasta hace pocos días?

Para comprender las razones hay que tener claros dos aspectos: la afinidad política entre ambos dirigentes del PSC y las políticas de seguridad implementadas en Santa Coloma en los últimos años. La afinidad puede resumirse en una escena del otoño de 2016, cuando Miquel Iceta ganó a Parlon las primarias del PSC por 700 votos: 4.889 (54%) vs 4.142 (46%). Iceta, que no quería división alguna en el partido, aceptó la propuesta de la alcaldesa de convertir a Illa en secretario de Organización del partido. Esa escena explica en parte el gobierno de hoy de Cataluña.

Policía de proximidad

Pero hay que fijarse también en la gestión de Parlon en su municipio para comprender su nombramiento en Interior. Hay un dato que llama la atención y que Santa Coloma fue uno de los pocos municipios del área metropolitana de Barcelona que registró un descenso de los delitos en 2023, según los datos del Ministerio de Interior. La alcaldesa lo atribuyó a varias razones, entre otras, a la puesta en marcha de una nueva Unidad de Apoyo e Intervención Rápida (USIR) de la policía local, especializada en la prevención y represión de la delincuencia.

La visión de Parlon trascendió la recurrente demanda de los alcaldes catalanes de acudir a las juntas de seguridad a pedir más patrullas de mossos. No es que ella no las pidiera, pero amplió el enfoque dando especial a relevancia a la policía de proximidad y lanzó también una iniciativa vintage: recuperar la figura de los serenos, aquellos vigilantes que desaparecieron en la década de los 70 del siglo XX y que eran reconocibles por sus silbatos y sus manojos de llaves de las casas del barrio.

Acompañamiento a mujeres

Santa Coloma trajo a los serenos de vuelta en el año 2019 en una nueva versión. Sin silbatos y sin llaves. Son parejas mixtas que han recibido una formación específica de 35 horas, que se desplazan a pie por los barrios en horario de 23:30 horas a 6:30 horas y que controlan actitudes incívicas en calles y plazas. Inspeccionan el mobiliario urbano, el alumbrado y se coordinan con los diversos servicios municipales (Policía Local y limpieza).

Pero una de sus labores más demandadas por los vecinos es el acompañamiento a personas, mayoritariamente mujeres que acuden a su puesto de trabajo o que regresan de él con la noche cerrada. También asisten a personas que necesitan ayuda, por ejemplo por encontrarse perdidas o desorientadas; a personas mayores que les da miedo bajar sola la basura o personas con movilidad reducida o discapacidad que necesitan acudir a una farmacia de guardia.

A la vista de la buena recepción que ha tenido entre los vecinos la figura de los serenos, otros municipios como Cornellà, Mataró y Figueres han seguido los pasos de Santa Coloma, que, en este tiempo, ha contratado a 72 personas para esta tarea. Cada año realizan una media de 2.500 actuaciones de acompañamiento a personas, mayoritariamente mujeres y 410 atenciones ciudadanas.