La desaparición de Carlos Mazón ha definido los primeros meses de recuperación tras la DANA hasta este 20 de marzo. Ayer, dio la cara por primera vez, no ante los medios, ni en actos oficiales, pero sí ante las víctimas directas de la catástrofe natural. Tras múltiples manifestaciones, denuncias y súplicas, el presidente de la Comunidad Valenciana ha intentado enmendarse y se compromete a hablar con todas las familias de las 228 víctimas. Quienes perdieron a un ser querido en las inundaciones han agradecido el gesto. “Nos ha perdido perdón”, trasladaron los que ya han visto al president.
No estaba previsto, pero finalmente Mazón dio el paso. Tras días aparentemente desaparecido, como se comprobó en las fallas, personal de su equipo de confianza se acercó a familiares de víctimas que estaban en los alrededores del Palau y les invitaron a pasar.
Una de las familiares cuyo marido falleció el 29 de octubre declaró a los medios a la salida de su encuentro con Mazón que se verá con todos los que quieran. “Vamos a ir solicitando cita y nos va a atender a todos”, comentó Susana, que prefirió no dar su apellido, pero sí el de su esposo muerto: “José Ruiz Torrecillas, de Catarroja”.
Otro valenciano afectado, Juan José Monrabal, explicó que van a ir entrando “de cinco en cinco”, según acordó con el líder del PP valenciano. Susana manifestó que esto era necesario y, aunque casi cinco meses después, “más vale tarde que nunca”.
Monrabal llevaba días acudiendo a las puertas del Palau de la Generalitat con su pancarta para pedir explicaciones por la muerte de su madre, de 84 años, en Catarroja a causa de la DANA. Ayer, jueves 20 de marzo, fue invitado de manera improvisada junto con Susana y Pilar (acompañada de una amiga), que perdieron a sus respectivos maridos en la dana, a entrar en la sede del Consell para entrevistarse con su president.
La vecina expresó: “Ha tardado mucho, pero más vale tarde que nunca”. La vecina de la zona 0 lamentó que “nuestros muertos” no pueden volver, pero reclamó la importancia de ser escuchados. “Le he dicho que mi critica era que no diera la cara como hasta ahora, me parecía de cobardes. Si das la cara las cosas se hablan”, manifestó. Respecto a la tormenta judicial que afrontan los políticos que gestionaron la catástrofe natural añadió: “Ya se repartirán las culpas”, y adivritió que el comportamiento hasta ahora ha sido “sospechoso”, pero se encuentran abiertos a dialogar.
Ambos afectados destacaron un lado del líder del Consell que hasta ahora el publico ha puesto en duda: su lado humano. “Nos ha tratado como personas”, confesó Susana. Por su parte, Juan José reflexionó: “No porque sea político no tiene corazón, yo hoy he visto que tiene un poquito de corazón y le he dicho que haga el favor de ayudarnos”. Además, puntualizó que les pidió perdón y, a su parecer, “se ha portado como un hombre al recibirnos”.
Este acercamiento podría suponer una nueva etapa en la reconstrucción tras la tragedia y quizás la más importante: la humana. Hasta el momento familiares y damnificados se han ido constituyendo en asociaciones y colectivos representativos que se han dado a conocer a través de los medios de comunicación y de sus propias redes, como la Asociación Damnificados DANA Horta Sud Valencia, la primera en constituirse con alrededor de 400 miembros.
La mayoría, además, se ha personado en la causa que instruye la jueza de Catarroja, Nuria Ruiz Torraba. Las víctimas han lamentado en diversas ocasiones que Mazón no se haya puesto en contacto con ellas en todo este tiempo. A sus huéspedes hoy se ha excusado aludiendo que “no sabía sus números de teléfonos”.