Los tres principales protagonistas de la trama Koldo son hombres. José Luis Ábalos, su asesor Koldo García y, por último, el conseguidor de la trama, el empresario Víctor de Aldama. Según el último informe de la Unidad Central Operativa al que ha tenido acceso Artículo14, los tres lideraron una trama corrupta que no se quedó solo en llevarse comisiones por la venta de material sanitario a organismos públicos en lo peor de la pandemia, sino que intercedieron en el rescate a Air Europa y establecieron conexiones con el Gobierno del Régimen de Nicolás Maduro. Si bien, en la trama también destaca la presencia femenina, clave en muchos de los tejemanejes.
Jessica
Según señala el informe de la UCO, Jessica mantenía una “relación particular” con Ábalos. Era su amante. Por eso, Ábalos encargó a Aldama pagar el alquiler del piso en el que vivía Jessica en pleno centro de Madrid. Costó 88.101 euros en tres años y los pagos se realizaron a través de dos testaferros. Hechos que demostrarían que el entramado también servía para sufragar la manutención de esa ‘amiga’ de Ábalos.
Se referían a ella como ‘Jessica España’ o ‘Jessica 20 minutos’ y hay conversaciones en las que Jessica se queja directamente a Koldo de los desperfectos de la casa. Cuando Jessica tuvo que dejar la casa, publicó en un estado de Whatsapp, una foto del piso con el comentario: “Y colorín colorado”. Joseba, el hermano de Koldo, hizo un pantallazo que reenvió a su hermano para comentar: “Perfecto 3 años y medio de casa gratis”, jactándose de la situación.
Además, Ábalos se encargó de que no le faltara trabajo y esas gestiones se las dejaba a Koldo. En febrero de 2021, Ábalos envió a Koldo un pantallazo de su conversación con Jessica en la que esta recordaba al ministro que se le terminaba el contrato en INECO. Koldo respondió a su jefe que “hay que pasar a otro sitio y luego vuelve, lleva 18 meses”.
Hablaban, del contrato como administrativa que Jessica ostentó para la empresa de ingeniería INECO. La mujer incluso mostraba al hermano de Koldo, Joseba García, sus nóminas. Ganaba unos 1700 euros netos mensuales. Tras el INECO obtuvo un contrato en Tragsatec. El contrato se lo envió ella misma a Koldo.
Delcy Rodríguez
Es la vicepresidenta de Venezuela, la mano derecha de Nicolás Maduro. Sobre ella pesan sanciones de la Unión Europa mediante las cuales tiene prohibido pisar espacio Schengen debido a la dudosa calidad democrática de su Gobierno.
Pese a ello, Ábalos desde 2019 deseaba entablar relaciones con ella. De hecho, se pone en contacto con Delcy Rodríguez en cuanto Sánchez llega a la Moncloa: “Me será muy grato poder conversar las posibilidades que nuestros dos países tendrán una vez investido el presidente Sánchez”. “En esa reunión me gustaría hablar de las posibilidades que tiene ahora mismo Venezuela para salir de las sanciones”, reza una misiva del exministro a la vicepresidenta.
Cuando por fin se cerró esa reunión, Ábalos informó al presidente del Gobierno: “La vicepresidenta de Venezuela viene en privado el lunes y quiere verme discretamente como continuación del encuentro que tuve con el ministro de comunicación (que es su hermano). La gestión que acordamos en favor de las empresas españolas ha permitido que Duro Felguera haya cobrado una importante deuda”, reza un mensaje enviado por Ábalos a Sánchez. A lo que el presidente contestó: “Bien”.
Aldama fue el primer interlocutor de la trama con Delcy. El informe de la UCO muestra el interés por establecer relaciones comerciales con ella. Hablan incluso de comprar 106 barras de oro por 52,6 millones de euros: “No te dije, es lo amarillo, ya está todo listo”, dijo Aldama a Delcy en una de sus conversaciones.
Francina Armengol
En el documento consta que Francina Armengol, la expresidenta de Baleares y actual presidenta del Congreso de los Diputados, recibió mensajes de Whatsapp de Koldo pidiendo que le llamara. La presidenta puso en contacto a Koldo con Patricia Gómez Picard, entonces consejera de Salud de Baleares. Koldo le contestó: “Vale, cariño, te mantengo informada de todo”. Esto se materializó en compras por el gobierno de Baleares por más de 1 millón de euros a las empresas de Aldama.
Pero la actual presidenta del Congreso de los Diputados negó cualquier relación directa con la trama. Alegó que cerró contratos con las empresas de Aldama por el momento de crisis sanitaria que asolaba el país: “Yo no estoy metida en ningún caso de corrupción. Me quiere inhabilitar como presidenta del Congreso diciendo que estoy metida en un caso de corrupción y no es cierto. Hacen ustedes una forma de hacer política que detesto”, aseveró Armengol en la comisión de investigación de las mascarillas del Congreso de los Diputados.
La secretaria de Javier Hidalgo
Jugó un papel clave en el rescate de Air Europa. Fue la interlocutora entre Javier Hidalgo, CEO de Globalia (matriz de Air Europa) y Víctor de Aldama, en ese momento consejero de Air Europa. Aldama mantenía una relación muy cercana con la mujer. Cuando ya parecía que el rescate estaba encaminado, Aldama le envió este mensaje: “Buenos días, corazón. Esto que te voy a comentar es solo para ti. No digas que lo sabes por mí, por favor y esto es para tu tranquilidad. Ayer por fin conseguimos la carta del gobierno diciendo que nos da la financiación. Besazo y tranquila, todo se arreglará, no sé si valoraran todo el trabajo que se está haciendo, pero todo se va a arreglar. Besos”. A lo que la secretaria le contestó: “Buenos días, cielo, muchas gracias por confiar en mí. Yo no sé nada”.
La compañía aérea estaba a punto de quebrar por el parón de la pandemia. Aldama intervino para que el Gobierno de Sánchez insuflara 475 millones de euros públicos a modo de rescate. El informe de la UCO determina que el empresario “se valió de su relación con Koldo y Ábalos para influir en la concesión final del rescate a air Europa”, según reza el informe.