Javier Hidalgo, el CEO de Globalia -matriz de Air Europa-, habló directamente con José Luis Ábalos, ex ministro de Transportes y con Koldo García, quien fuera su asesor. Su objetivo era conseguir el rescate de la compañía aérea tras el parón por la pandemia del coronavirus. Si bien es cierto que el grueso de la negociación la llevó Víctor de Aldama, por aquel momento consejero de la compañía, Hidalgo era consciente de lo que se estaba negociando.
Fuentes cercanas al entorno de Hidalgo consultadas por este periódico aseguran que Aldama “lo hizo todo a sus espaldas” y que el rescate lo negoció “íntegramente el equipo jurídico de la compañía”. Sostienen esta versión porque, en un momento dado, el empresario dijo a Koldo García que no contactaran con él directamente. “Tiene que aprender”, aseveró Aldama.
Quizá en algún punto de la negociación tomó el mando único Aldama pero entre los mensajes intervenidos por la UCO, a los que ha tenido acceso Artículo14, hay audios del propio Hidalgo haciendo mención directa a estas negociaciones. “Te estaba intentando llamar. He hablado con Koldo, el miércoles nos vemos con el ministro”, se escucha en uno de los audios enviados por el CEO de Globalia. En esas semanas de 2020, el plan era que el ministerio de Transportes enviara una nota de prensa hablando de la conveniencia de rescatar Air Europa por considerarse una empresa estratégica.
En aquellos días, había mucha tensión y Aldama presionaba a Koldo García para agilizar el trámite: “La nota de prensa capullo que el otro ya está que se sube por las paredes”, dice en otro de los mensajes.
Tal era la tensión que llegó un momento en el que pensaron que no conseguirían el rescate, e Hidalgo se puso nervioso. Aldama se lo hizo saber a Koldo García: “Está jodido, muy jodido con el tema este. Se está buscando la vida y acaba de llamar a Begoña”. No es difícil deducir que se trataba de Begoña Gómez, la mujer del presidente, a quien Hidalgo conocía con anterioridad. A lo que el exasesor de Ábalos respondió: “Que llame a Pedro o a quien tenga que llamar”.
Ese “Pedro” podría referirse al mismo presidente del Gobierno o a Pedro Saura, por aquel entonces secretario de Estado de Infraestruturas. Artículo14 ha preguntado a Koldo García a quién se podría referir y asegura que no lo recuerda, pero que podría ser cualquiera de los dos.
El segundo objetivo de la compañía era una carta de la SEPI -Sociedad Estatal de Participaciones Industriales- con las condiciones del rescate. Koldo García pasó a Aldama una captura de pantalla de su conversación con el ministro en el que decía: “Puedes llamar a Hidalgo que nadie le dice nada y está mirando el móvil”. A lo que Ábalos respondió “Me dijeron que lo llamaban esta mañana y le dije a Saura que lo llamaba”.
El exministro acabó reenviando un mensaje de un directivo de la SEPI: “Le he llamado a mediodía y estamos hablando con su abogado para intentar cerrar la carta. Hemos quedado en seguir en contacto”.
Por tanto, Hidalgo contactó directamente con la SEPI para cerrar esa carta. Semanas más tarde, Aldama se quejaba de las condiciones del rescate a Koldo García: “Me dice que eso no puede ser”. El exasesor le contestó: “Tranquilo he pedido una nota y ahora te la mando para que mañana en el consejo rector del fondo se apoye a la compañía con ese punto”.
En una nota de prensa, la compañía aérea se desvinculó de un chalé en Marbella que disfrutó el exministro, según interpreta la UCO como contraprestación de todas las gestiones realizadas para el rescate. En la circular, Air Europa considera que estas conclusiones del Instituto Armados son meras “divagaciones” y “niega rotundamente haber abonado el alquiler de una vivienda para el señor José Luis Ábalos y haber solicitado la intervención de la señora Begoña Gómez en la negociación de los préstamos concedidos por la SEPI en 2020”.
Los agentes lo asocian por las fechas en los que se seleccionó la mansión vacacional y por un mensaje de Koldo García a su entonces jefe, el ministro: “Te comento esto sale gratis por las molestias generadas”. Aldama participó en la selección del alojamiento pero lo cierto es que no existen evidencias de que Hidalgo estuviera detrás de esta supuesta contraprestación.