Cristina Álvarez, asistente de Begoña Gómez en la Moncloa, se ha acogido a su derecho a no declarar en el Senado. Álvarez, que por mandato constitucional debía comparecer en la Cámara Alta, se ha limitado a decir: “Agradezco el interés en mi persona, pero con todo respeto a sus señorías no contestaré a las preguntas que me formulen puesto que las cuestiones por las que se interesan de mi declaración se encuentran judicializadas”.
Cabe recordar que el juez Peinado, que investiga las actividades privadas de Gómez, citó este pasado jueves a declarar como testigo a Álvarez, quien participó en gestiones de la cátedra de la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
El titular del Juzgado de Instrucción Número 41 de Madrid adoptó esta decisión después de que la defensa de Gómez aportara unos correos electrónicos en los que se evidenciaba que Álvarez participó en gestiones con la UCM y empresas privadas relativas a uno de los másteres que Gómez codirigía. Este matiz es clave, pues si bien Álvarez, cuyo puesto oficial es el de directora de Programas, tiene entre sus funciones asistir en diversas cuestiones a la mujer del líder del Ejecutivo, se desconoce si ayudarla en sus negocios privados se incluye entre dichas tareas.
El pasado entre Gómez y las hermanas Álvarez
Según lo publicado por Artículo14, existe un nexo previo a la Moncloa entre Begoña Gómez, su asesora, Cristina Álvarez, y la hermana de esta, Esther Álvarez. Las tres acabaron de una u otra manera en los despachos de la Complutense, a menudo negociando asuntos relacionados con másteres postuniversarios.
Dicho nexo es el desaparecido Instituto de Directivos de Empresa (IDE-Cesem), donde Esther Álvarez fue directora de Estudios y Calidad durante 23 años (1997-2020) y donde Cristina Álvarez fue directora comercial durante 10 años (2008-2018). También Begoña Gómez pisó el territorio de IDE-Cesem para cursar el programa “Modelos integrales de gestión por competencias”.
La relación a tres bandas entre todas ellas acabó desembocando en la UCM después de haber adquirido una abundante experiencia en el sector educativo superior que va de la mano del patrocinio de empresas.
La mujer del presidente del Gobierno hizo las gestiones oportunas para hacerse con la codirección de la cátedra de Transformación Social y Competitiva de la UCM a partir del curso 2020-21 y lo hizo siempre acompañada de su asesora desde julio 2018 en la Moncloa, Cristina Álvarez, quien participó en varias reuniones con la Complutense, según han acreditado los propios responsables del centro educativo.
Y quien también consiguió un hueco en la Complutense después de que Begoña Gómez y Cristina Álvarez desplegaran sus iniciativas en la universidad pública fue la hermana de la asesora, Esther Álvarez. Así lo anunció el propio IDE-Cesem en octubre de 2019.