La secretaria general de ERC, Marta Rovira, está volcando todos los esfuerzos posibles en conseguir que la militancia de su partido (un total de 8.700 afiliados) den por bueno mañana, viernes, el pacto de investidura alcanzado con el PSC. Rovira ha movilizado a todos los miembros del Govern en funciones —con el president Pere Aragonès a la cabeza— para dirigirse a las asambleas territoriales y defender las virtudes del acuerdo con los socialistas, pero a quien no ha logrado poner de su lado es al expresidente de ERC Oriol Junqueras, que se ha situado en un cómodo terreno de nadie para que la consulta no arrase sus posibilidades de volver al cargo en el congreso de otoño.
“Entiendo las dudas expresadas por parte de muchos compañeros y compañeras sobre los acuerdos y su cumplimiento por parte del PSOE y PSC. Por tanto, en caso de que la militancia valide el acuerdo de investidura propuesto por la ejecutiva, el eventual apoyo al Gobierno del Estado y al Govern de la Generalitat por parte de ERC se tendrá que ir validando con el despliegue del acuerdo y retirarse explícitamente en caso de incumplimiento“, dijo Junqueras a través de sus redes sociales.
La militancia, movilizada
¿Qué significa su mensaje? Lo principal es que el expresidente de ERC no se quiere quedar en fuera de juego. Así que comenzó por expresar “todo el respeto por el trabajo realizado por el equipo negociador encabezado por Marta Rovira y por el contenido del preacuerdo que nos dieron a conocer el lunes, y también el martes, con más detalle, en las asambleas informativas”. Dicho lo cual, Junqueras se inhibió de destacar los puntos fuertes subrayados por la dirección de Esquerra: ni financiación singular, ni convención para el referéndum de autodeterminación, ni freno al 25% del castellano en las aulas.
Su plan consiste simplemente en sentarse a ver el resultado de la votación de las bases. La dirección de ERC no esconde su preocupación porque observa dos circunstancias: existe desconfianza hacia los socialistas y la militancia está movilizada. De ahí que Rovira esté trabajando desde hace bastante tiempo con cuadros del partido y con los cargos institucionales de ERC (alcaldes y miembros del Govern) para controlar a los afiliados y conducirlos al “sí” al pacto con los socialistas.
La votación de mañana
Será mañana, a partir de las 10.00 horas, cuando ERC ponga en marcha la votación, presencial y telemática, que se alargará hasta las 19.00h con esta pregunta: “¿Estás de acuerdo con que Esquerra Republicana vote a favor de la investidura del candidato socialista a cambio de la soberanía fiscal, la promoción y protección de la lengua catalana, la convención nacional para la resolución del conflicto político y el resto de medidas acordadas?”.
En paralelo a los esfuerzos orgánicos e institucionales de Rovira para atar a la militancia, la Asamblea Nacional Catalana (ANC), contraria a investir a Salvador Illa como presidente de la Generalitat, siguió con su campaña en redes para que la militancia de ERC reviente el acuerdo de investidura.
⬛⬜ Salvador Illa és el representant del 155, de l’espanyolització del país i de l’espoli fiscal.
Catalunya no s’ho pot permetre. Illa, no. Independència! pic.twitter.com/zwYHZFmN4D
— Assemblea Nacional Catalana (@assemblea) July 31, 2024
De llegarse a tal extremo, Cataluña se vería abocada a la repetición electoral y Carles Puigdemont podría evitar el regreso. En cambio, si la dirección de Esquerra logra alinear a sus bases, el Parlament de Cataluña procederá a convocar la sesión de investidura de Illa en breve con la prometida presencia de Puigdemont.