LA ESTRATEGIA DEL PP

“Hemos normalizado que Vox y Junts voten lo mismo”

Génova pone en valor que Abascal defienda una moción de censura para convocar inmediatamente elecciones, aunque siguen sin tener los votos: “Estamos disponibles para ello, que nos llamen”

El Partido Popular cierra 2024 acumulando cada vez más victorias parlamentarias contra el Ejecutivo. Los de Alberto Núñez Feijóo son conscientes de cómo están cambiando las dinámicas parlamentarias y aprovechan cada oportunidad para escenificar la debilidad del Gobierno, principalmente en materia económica y social. Esto es, en energía y fiscalidad.

En el equipo del líder gallego comienzan a acostumbrarse a tumbar las medidas de Sánchez con el apoyo de muchos socios que ahora comienzan a descolgarse de los votos que habían dado brindado al Gobierno, aunque exclusivamente para votaciones puntuales.

Sin ir más lejos, la semana pasada la derecha unió sus votos para tumbar el gravamen extraordinario a las grandes energéticas. “Tenemos básicamente el mismo ideario económico”, sugieren las fuentes consultadas en las dirección del PP, tras sumar sus votos con Junts y el PNV. “Una muestra más más de la debilidad
parlamentaria del Gobierno”, se reafirman las citadas fuentes populares.

En síntesis, lo que logra Feijóo es aunar los votos que necesitaría para una moción de censura pero, de momento, exclusivamente en cuestiones económicas. “Es más gasolina a un fuego descontrolado”, aseguran fuentes de la dirección nacional del partido, que consideran que el Gobierno “va a la deriva”.

Una nueva aritmética de la que el entorno de Feijóo también saca una lectura que, a sus ojos, es clave de cara al futuro: la unión de los votos de Vox y Junts. En efecto, los de Santiago Abascal también votaron en contra del paquete que proponía el Gobierno. “Hemos normalizado que Junts y Vox voten juntos”, proclaman las fuentes consultadas.

En este sentido, en Génova ponen en valor que los portavoces de Abascal ya defienden claramente una moción de censura con Junts en la ecuación siempre y cuando siempre sea para convocar automáticamente elecciones generales.

¿Esto significa que algo se mueve al respecto? “No tenemos los votos; si quieren cambiar el Gobierno que nos llamen. Estamos disponibles las 24 horas del día, los siete días de la semana”, afirman desde Génova13. De momento, Junts asegura que esa posibilidad, la de la moción de censura, no está encima de la mesa en los planes de Carles Puigdemont.

La cuestión de confianza

En lo que sí está Puigdemont es en la pantalla de la cuestión de confianza. O, mejor dicho, en su iniciativa que emplaza al presidente a someterse a ella. Una proposición no de ley, no vinculante, que de momento sigue parada en la Mesa del Congreso de los Diputados, aunque en el PSOE y Sumar ya no rechazan por completo aceptar su tramitación a fin de no enfadar al líder fugado, tal y como avanzó Artículo14. La Mesa tomará la decisión tras las vacaciones, en febrero o marzo.

“Estudiaremos la propuesta y no nos cerramos a apoyarla”, aseguran fuentes de entorno de Feijóo a Artículo14. Pero aun saliendo adelante la iniciativa de Puigdedmont, su valor sería estrictamente simbólico. Es decir, serviría para dejar en evidencia una vez más la fragilidad parlamentaria del gobierno, que ya ha confirmado que descarta someterse a una cuestión de confianza.

En una rueda de prensa celebrada en Bruselas el viernes, Pedro Sánchez mantuvo la misma posición que los últimos días. “Los partidos que sustentamos al Gobierno de coalición cuando se planteó esta cuestión ya dijimos que no vemos la necesidad de someternos a una cuestión de confianza”, dijo el presidente del Gobierno ante las cámaras.

Fechas en el calendario

La siguiente fecha marcada en el calendario del Partido Popular es el 26 de diciembre, cuando se celebrará el último comité de dirección del año. Ester Muñoz, el gran valor en alza del partido, será la encargada de comparecer al término de la reunión en rueda de prensa. Feijóo hará balance del año 24 horas después, el 27 de diciembre.