María Jesús Montero pisa el acelerador. La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda ha citado a las comunidades autónomas el próximo 26 de febrero para celebrar el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Entre las cuestiones más importantes, la reforma del sistema de financiación y la quita de la deuda.
La cita, se quejan desde el PP, aun no cuenta con orden día y, previsiblemente, Montero tendrá que buscar un equilibrio entre lo pactado con los independentistas -esto es, Junts y ERC- para Cataluña, y el resto de comunidades, en su mayoría gobernadas por los populares.
“Parece que el Gobierno tiene más interés en hablar con sus socios separatistas que con el conjunto de las comunidades”, reprochan desde la dirección de Alberto Núñez Feijóo, que cuestiona que la convocatoria sea justo después de que la anfitriona, María Jesús Montero, estrene su etapa como líder del PSOE en Andalucía.
La estrategia del PP pasa por no caer en la “trampa” de Sánchez. Fuentes de Génova confirman a este periódico que su idea es coordinar la respuesta de todos las regiones. La idea es crear “un muro de contención” ante una propuesta que consideran “injusta” de base. “Esto no se decide en una mesa camilla entre dos”, sentencian las citadas fuentes, conscientes de que el Gobierno buscará una brecha entre las autonomías.
“No a la condonación de la deuda”
La línea roja de Génova es la quita de la deuda y por eso desde la dirección no creen que esta reunión vaya a servir de mucho. “El PP no está a favor de la condonación de la deuda”, resumen fuentes del entorno de Feijóo, y añaden que la clave se encuentra “no en perdonar, sino en reestructurar”. “Los españoles no tienen opción de que le condonen el IVA o el IRPF”, aseguran desde la dirección. “No tendría sentido que los políticos nos perdonáramos dinero entre los políticos”.
La posición del PP, insisten, no es nueva. Ya en septiembre, los presidentes firmaron un acuerdo en esta materia, escenificando unidad de acción. Desde Génova aseguran que, a pesar de los intereses del Gobierno, “las decisiones deben ser técnicas y no políticas”. “En ningún caso la financiación puede decidirse fuera de nuestras fronteras”, sentencian. Y reprochan al Ejecutivo que esté “sometido al criterio que le imponen desde Waterloo”.
Debate entre barones
La posibilidad de extender la quita de deuda a todas las comunidades autónomas abre debate entre las diferentes autonomías del PP. Mientras que para algunos barones, los más pragmáticos, acogerse a esta condonación supondría un balón de oxígeno, otros tachan la medida de “triunfalista e injusta” y aseguran a Artículo14 que acogerse a una rebaja de deuda equivaldría a “repartir miseria”.
A pesar del debate, lo cierto es que la mayor parte de barones consultados por este periódico están de acuerdo con la dirección general. No a la condonación, sí a la reestructuración. “Tenemos un modelo que ha pasado varias crisis y no responde a las necesidades reales de las comunidades”, reflexiona un barón. “Nuestra postura es clara, previsiblemente todos haremos lo mismo”, reconoce un segundo dirigente. “Deberían explicar ya cuál es el orden del día”, abronca un tercero con mando en plaza.
En este contexto se celebrará la reunión entre la ministra y los populares, que reconocen a Artículo14 que la afrontan moviéndose entre el pesimismo y el cabreo. “De la cancelación de deuda nosotros no hablamos, queremos hablar del modelo de financiación”, advierte un cuarto dirigente.
Los mecanismos de reestructuración de deuda, como el aplazamiento o la rebaja de intereses, están sobre la mesa, pero aún falta claridad sobre cómo se implementarán, especialmente en relación con el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). “Poco podemos opinar hasta que se definan los detalles”, concluyen desde la dirección del partido.