El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha advertido este viernes de que “ninguna militancia obliga a ser cómplice”. “Eso es lo que quiso evitar” el exsecretario general del PSOE de Madrid Juan Lobato, “ser cómplice de nada, de lo que fuera, a lo mejor sin saber de qué se estaba hablando”, ha apostillado.
Desde la localidad toledana de Consuegra, y preguntado por la declaración de Lobato como testigo en el Tribunal Supremo ante el juez que investiga la presunta filtración a la prensa de una serie de correos de la pareja de Isabel Díaz Ayuso por parte de la Fiscalía, García-Page ha celebrado que Lobato no salga como imputado.
“Creo que finalmente para él es muy buena noticia, evidentemente, porque realmente supongo que la declaración, no la conozco, pero habrá consistido en básicamente referirse a lo que ya dice el acta notarial”, ha apuntado el presidente castellanomanchego.
Dicho esto, ha destacado que las consecuencias no las esperaba para Lobato. “Pueden venir en otro orden y en otras circunstancias, pero entiendo que para él no”.
“La militancia en un partido te lleva a compartir objetivos, a compartir doctrina, a compartir argumentos. Y la militancia en un partido te obliga a guardar una lealtad a los objetivos políticos y electorales. Pero ninguna militancia obliga a ser cómplice, y yo creo que eso es lo que quiso evitar Juan Lobato, ser cómplice de nada, de lo que fuera, a lo mejor sin saber de qué se estaba hablando”.
Preguntado por si le preocupa que quién sí pueda salir perjudicado sea la Moncloa, el presidente regional ha afirmado desconocer “por completo” todo lo que pasó en ese circuito. “Realmente es increíble porque las informaciones son muy apabullantes”, ha subrayado.
Además, ha vuelto a hacer hincapié en las declaraciones que ya hizo este jueves en las que esperaba que la capacidad de Lobato “no se eche a perder”. También ha vuelto a mostrar su preocupación por el hecho de que en una etapa como esta en la vida política se esté “quemando a marchas forzadas a muchísimo capital”, gente joven “con mucha valía”, y eso, a su juicio, “es un síntoma no muy saludable” de la situación política en general.
Asimismo, ha manifestado que la única actitud que se puede tener cuando está una investigación en marcha con los tribunales es responder la verdad ante los jueces y que se vayan aclarando las circunstancias. “A la hora de la verdad lo único importante son los hechos, qué ha pasado, y eso lo tiene que determinar un juez y a partir de ahí se establece qué consecuencias tienen las cosas”.
“Ojalá y sinceramente todos los pleitos que están en marcha, –que son una barbaridad–, se vayan solventando, porque realmente establecen una sombra turbia sobre la realidad del partido y del Gobierno que me gustaría quedara despejada”, ha concluido.