Perfil

Feijóo erige a Ester Muñoz como azote de Sánchez por la corrupción

La vicesecretaria despunta en el comité de dirección y Feijóo ha decidido darle más protagonismo

La dirigente del PP Ester Muñoz Efe

Ester Muñoz es mujer y tiene la melena rizada, como Isabel Díaz Ayuso. También se expresa con rotundidad y hay quien la ubica en el “ala dura” del Partido Popular por sus ideas liberales y las agallas que gasta en la Tribuna del Congreso de los Diputados, donde ocupa escaño desde las pasadas generales del 23-J y se ha convertido en una de las principales voces en la bancada de la oposición. Ascendió a la planta noble de Génova 13 hace exactamente un año, cuando Alberto Núñez Feijóo revolucionó el comité de dirección con un puñado de incorporaciones, la mayoría de ellas mujeres desconocidas para el común de los votantes.

Entonces, a Muñoz le cayó entre manos la vicesecretaría de Sanidad y Educación, aunque ha ido asumiendo otras funciones. De hecho, de manera oficiosa, ahora asume una nueva responsabilidad: se ha convertido en la portavoz del aparato para dar la batalla contra la corrupción del Gobierno de Pedro Sánchez. Así lo ha decidido Feijóo, que quiere dar protagonismo a “perfiles más frescos” de la formación que “complementen” a los principales rostros que aparecen a diario en las pantallas de televisión.

Fuentes próximas al líder popular reconocen que, en el típico proceso de ensayo-error que llevan a cabo con los distintos dirigentes, han dado con la tecla en la figura de Muñoz. “Es buena comunicadora, tiene un alto nivel de oratoria. Además es joven, forma parte de una generación siguiente a la de otros de sus colegas, como Cuca, Tellado o Sémper y, pese a ello, cuenta con experiencia de gestión en su tierra”, recalcan. Antaño, la vicesecretaria fue delegada del Gobierno de Castilla y León en su ciudad natal, León, donde a día de hoy mantiene el cargo de presidenta provincial del partido.

El pasado lunes, en el maitin semanal de la sede popular, en lugar del portavoz -que se encontraba en un viaje institucional en México- apareció Muñoz. No era la primera vez que se subía a las tablas de la sala de prensa de Génova. Y cada vez lo hará con más frecuencia. La intención de Feijóo es que salga al campo de juego para una partida crucial contra Pedro Sánchez: la de la corrupción. Su pasado, ajeno a los tiempos en los que las siglas del PP se vieron envueltas en escándalos similares a los que ahora azotan al Ejecutivo, le permiten hablar sin mácula de algún tipo.

“Hemos encontrado a una defensa en la cantera del partido y Feijóo quiere darle sitio. Nuestra misión es cubrir todos los flancos: Borja nos sirve de reclamo para los electores que están colindando con la formación que se encuentra a nuestra izquierda, el PSOE, y el mensaje de Ester atrae a otro tipo de votantes”, señalan a Artículo14 fuentes de la dirección.

De todas las personas que se estrenaron en la cúpula del partido el pasado año, Muñoz es la que más ha despuntado. Feijóo, aseguran en su entorno, aprecia varias de sus virtudes. La que más: “Su capacidad de trabajo”. Y su sentido de la responsabilidad que ha venido demostrando de un tiempo a esta parte. Para muestra, un ejemplo: “Una vez le pedimos que participase en un programa de televisión y nos dijo que no, porque no controlaba bien el tema del que se iba a hablar. No quería ir con el trazo grueso, como hacen muchos tertulianos que se pasean por los platós. Cuando ya se empapó el tema, fue”. Quienes más la conocen destacan de ella que es meticulosa.

Recientemente, fue la encargada de llevar la voz cantante en un Pleno difícil para el PP: la comparecencia de Teresa Ribera en el Congreso de los Diputados para rendir cuentas por la gestión de la DANA. Muñoz saldó la papeleta con nota. En las sesiones de control, se ha convertido en una imprescindible. Y en la nueva fase que entra la legislatura, copada por un sinfín de investigaciones judiciales, asumirá un rol de comandante supremo.

De momento, el PP ha optado por una estrategia de confrontación dialéctica para minar en las filas socialistas con la corrupción. Si antaño los populares fueron al choque a través de los tribunales o la calle, ahora Feijóo quiere que la ofensiva consista en una denuncia constante. Nada de querellas infructuosas. “La muerte de Sánchez será a pellizcos”, reiteran desde el equipo del líder de la oposición. “Las investigaciones judiciales acaban de empezar, esto va para largo, calma”. A fin de contentar a los dirigentes que demandan más contundencia contra el Gobierno, el paso al frente es elevar el tono. Y la comandante: Ester Muñoz.