En apenas tres meses Óscar López ha pasado de ser jefe de Gabinete del presidente a ministro para la Transformación Digital y líder por designación directa del PSOE en Madrid. El ascenso meteórico lejos de interpretarse como un premio en las filas del partido, y especialmente entre los que han trabajado estrechamente con Sánchez y López, se lee como la necesidad del presidente de colocar “fusibles” para evitar que los escándalos que le rodean le abrasen.
Los fusibles son lo primero que se funde cuando la corriente se dispara, de ahí el símil que hace en conversación con Artículo14 uno de los hombres que más conoce a Sánchez. La candidatura del ministro de Transformación Digital para liderar la federación socialista madrileña se oficializará en 24 horas. Está previsto que, salvo sorpresa de última hora, sea el único que opte a la secretaría general del PSM después de que Juan Lobato diera un paso atrás tras conocerse que había registrado ante notario los mensajes que se cruzó con ella por entonces jefa de gabinete de López, Pilar Sánchez Acera, sobre la filtración de datos personales de la pareja de Isabel Díaz Ayuso.
Es precisamente el caso de Alberto González Amador el que puede complicar el futuro más inmediato del llamado a liderar a los socialistas madrileños. El Supremo investiga si hubo un delito de revelación de secretos tras publicarse en la prensa el mail en el que la defensa de la paraja de la presidenta de la Comunidad de Madrid ofrecía un pacto a la Fiscalía con relación al fraude fiscal del que se le acusaba. Ayer mismo el juez Ángel Hurtado citaba como testigos entre los días 8 y 9 de enero a Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de Ayuso, y a ocho periodistas.
Tal y como adelantó este periódico, desde el Supremo señalan que Pilar Sánchez Acera también será citada cuando el juez tenga analizada la información que recabó del teléfono de Lobato que fue interrogado el pasado viernes. Detrás ella la siguiente pieza por jerarquía de mando es el propio López, señalan desde el alto tribunal.
En el partido en privado también apuntan al que fuera mano derecha de Sánchez como el cerebro de la operación para filtrar los datos fiscales de la pareja de Ayuso. “Quería sacarlo de Moncloa y ahora quiere sacarlo del Gobierno”, reflexiona una fuente cercana al entorno más estrecho del presidente.
Las fuentes consultadas dan por hecho que el desembarco de López en Madrid nada tiene que ver con armar una candidatura que pueda competir en las próximas elecciones con Ayuso. De hecho señalan a la concejala del Ayuntamiento de Madrid y portavoz adjunta del grupo municipal, Enma López, como la “verdadera candidata de Sánchez” para intentar conquistar la Puerta del Sol.
La cara en las tertulias
En el congreso del PSOE celebrado el pasado fin de semana en Sevilla López fue elegida secretaria federal de Política Económica. La concejala ya tiene galones en la Ejecutiva como muestra de confianza del presidente del Gobierno. Enma López ha sido la cara visible del partido en las tertulias políticas en los últimos meses en los que han saltado a la palestra escándalos como las imputaciones de Begoña Gómez o del ex número dos en Ferraz, José Luis Ábalos.
El currículum del futuro secretario general del PSM le inhabilita a ojos de sus compañeros de filas para dar la batalla frente a Ayuso. Óscar López dirigió el PSOE de Castilla y León entre 2008 y 2012. Con él como candidato en 2011 los socialistas firmaron una derrota histórica. Los que le conocen auguran que “romperá” el partido en Madrid como lo hizo en Castilla Y León donde se le recuerda por las luchas de poder internas.
A su “gafe” atribuyen también los socialistas la sonada derrota en las autonómicas y municipales del 28 de mayo que derivó en un adelanto electoral tras el enfado del presidente con sus fontaneros a los que desde ese día desterró del olimpo sanchista. La era López en Madrid arranca mañana, pero no la de Óscar sino la de Enma.