Sus nombres no estarán en las papeletas del próximo 9 de junio, día de las elecciones europeas, pero su protagonismo será absoluto. Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo se la juegan en una especie de segunda vuelta cuando no se cumple ni un año de las generales. El PP ha definido los comicios como un plebiscito sobre las decisiones tomadas por el presidente para continuar en Moncloa, con la ley de amnistía -que ya espera su votación definitiva en el Congreso- como elemento clave de censura. Si bien, las catalanas han dado un balón de oxígeno a los socialistas, según los sondeos internos a los que ha tenido acceso este periódico.
Salvo sorpresa mayúscula, con las europeas concluirá el extenuante ciclo electoral de este año. Sánchez asegura que no adelantará las generales pese a su evidente debilidad parlamentaria, demostrada esta misma semana en las Cortes Generales, donde hasta sumar votó en contra de su ley contra el proxenetismo. Los comicios del 9J no cambiarán los planes del presidente de una legislatura de cuatro años, según él mismo dijo en una reciente entrevista en La Sexta. Su objetivo, una vez se aclare la gobernabilidad en Cataluña, es aprobar los Presupuestos Generales del Estado.
En todo caso, tanto en Ferraz como en Génova son plenamente conscientes de que sus líderes se la juegan este 9J. Y la contienda electoral parece estar más ajustada de lo previsto hace unos meses, según los últimos estudios demoscópicos del PP. Antes de los comicios catalanes, los populares sacaban a los socialistas hasta seis puntos de distancia; ahora, esa distancia se ha recortado a la mitad. “Estamos alrededor de los tres puntos por encima”, según las fuentes consultadas. En el equipo de Sánchez tienen estudios parecidos.
Básicamente, Feijóo ha rebajado expectativas mientras Sánchez las ha elevado. Si bien, en la dirección nacional del PP son taxativos: “Ganaremos con claridad las elecciones europeas”, doblando el resultado de los anteriores comicios comunitarios. En este periódico, Ángela Vera ya contó el pasado domingo que voces de la formación consideran que si el PP obtiene una distancia con el PSOE menor a cuatro punto sería “demoledor” para su líder y que el jefe del Gobierno podría vender el mensaje de que la amnistía está “amortizada”.
Además, el PP tiene su particular batalla con Vox, en su intención de aglutinar a todo el votante de centroderecha bajo sus siglas. Y las fuentes consultadas admiten que los de Santiago Abascal “aguantan bastante bien”, más aún después del protagonismo que han conseguido gracias al incendiario discurso de Javier Milei, el presidente de Argentina, en su acto del pasado domingo, en el que llamó “corrupta” a Begoña Gómez. “PSOE y Vox están intentando hacer un sándwich al PP”, en palabras de un líder regional popular, pero “nos puede anclar en el centro”.
El PP pretende reforzar su liderazgo demoscópico con la manifestación que ha convocado este primer domingo de campaña en Madrid, que espera que sea la más numerosa de cuantas ha auspiciado desde el inicio de la legislatura. La implicación de las estructuras territoriales será total fletando centenares de autobuses. La convocatoria es para protestar contra la ley de amnistía, la “política de bulos” de Sánchez y frente a la “sospecha de corrupción sobre su Gobierno, partido y entorno”, en relación a su cónyuge.
Gómez ha sido la protagonista de las horas previas de la campaña comienza este jueves. Como adelantó este periódico, al PP no le bastaron las palabras de Sánchez en el Congreso asegurando que es “honesta” y le llevará a la comisión de investigación en el Senado para que dé explicaciones. “¿Si hubiese sabido que su esposa avalaba al peticionario de un concurso, no lo habría otorgado? ¿Le ha preguntado a su esposa para qué firmó papeles inútiles que la pueden involucran en un proceso penal? Cuando a alguien se le ofrece comparecer con abogado en unas diligencias secretas, ¿en calidad de qué se le cita?”, inquirió Feijóo a Sánchez en el super pleno del miércoles. “No ha contestado nada”, se quejaron desde el PP. “Política del fango”, se revolvió Sánchez.
Duelo histórico de mujeres el 9J
Así las cosas, poco hueco político y mediático podrán tener quienes buscan un asiento en la Eurocámara. Y menos aún para hablar de asuntos comunitarios. Y ello pese a que estas elecciones europeas nos deja un histórico duelo entre mujeres. A Teresa Ribera por el PSOE y Dolors Montserrat por el PP se suman Estrella Galán por parte de Sumar e Irene Montero de Unidas Podemos en la terna de candidatas. Vox se descolgó en este sentido, toda vez repite Jorge Buxadé como cabeza de cartel.
Las nueve elecciones previas incluyeron siempre una fuerte mayoría de candidatos masculinos. No se incluyó a una mujer hasta el año 1999, con Rosa Díez fue la número uno del PSOE. Tampoco se presentó ninguna mujer en los años 2004 y 2009, donde Jaime Mayor Oreja y Willy Meyer repitieron en el PP e Izquierda Unida respectivamente, y el PSOE presentó primero a Borrell y después a Juan Fernando López Aguilar.
En 2014 volvió una mujer a las listas. Fue Elena Valenciano por el PSOE, pero el resto de candidatos, que incluían a Iglesias en su debut europeo, seguían siendo masculinos. La brecha solo empezó a igualarse en 2019, cuando el PP presentó a Montserrat e Izquierda Unida a María Eugenia Rodríguez Palop. Cabe destacar que, aunque el candidato oficial de los socialistas fue Borrell, Iratxe García le sustituyó una vez ganadas los comicios -sin llegar a ser considerada candidata-, informa Leticia Batista.