DESDE GÉNOVA13

Sánchez fuerza a Feijóo a endurecer su oposición y causa dudas en el PP

El PP acertó en el resultado de los cinco días de “reflexión” de Sánchez: creían que no dimitiría y así ha sido. Pero el miedo a que haya conseguido movilizar a su electorado aumenta

Alberto Núñez Feijóo

Pedro Sánchez comparece en la escalinata de la Moncloa: “He decidido seguir con más fuerza si cabe”. Una carcajada generalizada se escuchaba en la sala donde -los miembros del comité de dirección del PP- seguían atentos las palabras del presidente en la sede nacional de la formación, en Génova13. Una carcajada de incredulidad, de estupefacción. “Es capaz de todo, se ha reído de todos”, decía un miembro de la cúpula.

Lo cierto es que, detrás de esa carcajada, también se escondía cierto alivio. Miembros del PP reconocen -en privado- que preferían que Sánchez no dimitiese, tal y como ha desvelado Artículo14. El motivo es que toda la estrategia del partido se realizó (en su día) con Sánchez como adversario y no saben cómo afectaría en las urnas que el PSOE tuviese (por primera vez) a una mujer al frente. Tampoco están aún en la pantalla en la que Alberto Núñez Feijóo tenga que “enfrentarse” a María Jesús Montero u otra candidata, por lo que, si Sánchez hubiese dimitido, tendrían que cambiar toda la estrategia de golpe.

Una vez conocida la decisión de Pedro Sánchez, Feijóo aparecía en la sala de prensa de Génova 13 con una retórica propia del ala más dura del partido: “Sánchez nos quiere colar un cambio de régimen por detrás de esta obra teatral”, sentenciaba el líder del PP. Salían en tromba los populares tachando a Sánchez de “caudillo”, “personaje autoritario” y acusando al presidente de haberse “bolivarizado” y de “querer controlar a los jueces y atacar a los medios de comunicación”. El expresidente, José María Aznar, llegaba a calificar la crisis de Sánchez de “comedia caudillista lacrimógena”.

Ya el martes, Feijóo reunió a sus senadores y diputados en el Congreso y -tras semanas de amagos e inconcreción- registraban una petición de comparecencia para que Sánchez dé explicaciones en el Cámara Baja por la presunta corrupción económica, política y de conflictos de interés que afectan a su gobierno y a su entorno personal, es decir, a su mujer Begoña Gómez. Es el primer paso, si no da las explicaciones en el Congreso, los populares avisan que harán que Sánchez comparezca en el Senado.

Sibilino y ante los suyos, Feijóo apuntaba: “Todo responde a lo que el señor Sánchez ya conoce. Y lo que los españoles probablemente conozcamos dentro de poco tiempo”, dijo referiéndose al volcado de los teléfonos móviles del sumario del ‘caso Koldo’. Lo que se obtenga de ese volcado, será clave para determinar si llaman a comparecer a Begoña Gómez, la mujer del presidente. Después de lo vivido en la última semana son cada vez más las voces internas que piden dar este paso.

Dudas en el PP sobre nuevas manifestaciones

Esta semana, el líder del PP también ha anunciado que volverá a sacar al partido a las plazas: “Nos volveremos a ver en la calle”. Los populares aun no tienen fecha concreta, pero se trataría de manifestaciones como las que ya organizaron contra la amnistía -han realizado ocho concentraciones en los últimos meses- y que algunos sectores del partido volvían a reclamar.

Pero, lo cierto, es que hay barones autonómicos que -en privado- dicen no comprender contra qué exactamente se van a manifestar en esta ocasión: “Para manifestarse tiene que hacer un motivo concreto y no podemos estar todos los fines de semana como con la amnistía”, dice un presiente autonómico.

Además, líderes territoriales, avisan: “La indignación con Sánchez a quien más beneficia es a VOX”. El voto de “cabreo” lo suele capitalizar VOX en el espacio de la derecha, añaden.

En esta ocasión, Santiago Abascal no va a apoyar al PP en las movilizaciones que puedan convocar. VOX organiza un gran acto el fin de semana del 19 de mayo y dudan de que el PP justo organice algo esas fechas. Creen que intentarán evitar el “duelo” y la comparación de asistentes.

Movilización de la izquierda

Dentro del PP todos alucinaron con la gestión de los tiempos y la forma de actuar de Pedro Sánchez durante sus días de “reflexión”. Y aunque dentro del PSOE el desconcierto también es mayúsculo, hay miembros del PP que creen que esta maniobra le puede llegar a salir bien al presidente. Hablan de la estrategia a corto plazo de Sánchez y su “impredecibilidad”.

Así, líderes del partido, creen que ha conseguido “apretar las filas” de cara a las elecciones catalanas y europeas: “Reaparece a trece días de las catalanas, donde va a sacar un resultado alucinante. Y ha podido comprobar quiénes (dentro del PSOE) no le apoyan. Ha tomado lista”, dice un miembro del PP. “Ya nadie habla del ‘caso Koldo’ ni de Puigdemont en su propia campaña electoral”, apunta otro líder autonómico.

Otros, en cambio, tienen dudas de que una “movilización tan personalista” pueda surgir efecto. Interpreta que a Sánchez esto le tiene que pasar factura: “No se puede mentir todo el rato a todo el mundo”. Hay quien dice que ha sido una “maniobra” propia de un “personaje acabado”. Si Sánchez ha conseguido movilizar a su electorado y su jugada termina en gol, sólo lo veremos con el tiempo.

El presidente reapareció en festivo (el 1 de mayo, Día de los Trabajadores) en la Feria de Abril de Barcelona. Entró, por sorpresa y sonriendo -aparentemente recuperado- al ritmo de una versión tecno de la canción Pedro de Raffaella Carrá. Porque así es él. De una crisis se lleva hasta un nuevo himno popular que se ha hecho viral: ¡Ay, Pedro, Pedro, Pedro!