“Tranquilidad”. Ese es el mantra que se traslada en Moncloa sobre la citación de Begoña Gómez este viernes en los juzgados. Una idea que, solo horas antes, los ministros con agenda pública también quisieron señalar. “No hay caso”, llegaron a afirmar, a pesar de que el proceso judicial sigue abierto. Cabe recordar que para el presidente del Gobierno la imputación de su cónyuge es fruto de la “máquina del fango”, motivo por el cual los miembros del Consejo de Ministros han llegado a poner en duda públicamente la labor del magistrado.
Tanto en los pasillos del Congreso como en las tertulias de radio y televisión Gómez fue la gran protagonista. Es inédito que la mujer de un presidente del Gobierno se siente en el banquillo de los acusados. Preguntado por ello en La Sexta, Fernando Grande-Marlaska, titular de Interior, acusó al magistrado Peinado de llevar a cabo una “investigación prospectiva ajena a los principios de un procedimiento penal”. Una dura crítica a esta instrucción, que, añadió, queda a “extramuros” porque causa indefensión para Gómez. Algo que, aseguró, nunca vio en sus 30 años ejerciendo como juez.
Asimismo, quien fuera magistrado de la Audiencia Nacional criticó que no se investiguen “hechos concretos y perfectamente definidos”, además de que el juez Peinado hablara en una resolución de una “investigación integral, completa, de la actuación profesional de la señora Gómez desde que su marido accede a la Presidencia del Gobierno”.
De esta manera, reiteró los reproches emitidos pocas horas antes en otra entrevista concedida a RNE. En ella, el ministro calificó la citación de Gómez, y la propia investigación provocada por una denuncia de Manos Limpias, como “algo completamente ajeno a lo que debe de ser una resolución judicial”.
Causa “indefensión” a Begoña
En la radio pública, Marlaska se detuvo a señalar que la instrucción que realiza el juez Peinado “causa indefensión a la señora Gómez y, evidentemente, afecta en derechos muy personalísimos de la misma”. Es más, el titular de Interior apuntó a que “este tipo de actuaciones” hacen que se ponga en duda al poder judicial, lo cual le “duele”.
Tras una introducción recordando su respeto a la independencia judicial, Marlaska afirmó que en este caso “no puede compartir ninguna de las resoluciones judiciales dictadas por el titular del juzgado de instrucción 41″. Sobre ello, especificó que se refiere a “cómo se admitió a trámite una denuncia formalizara por un sindicato de extrema derecha caracterizado por haber interpuesto querellas y denuncias contra muchas personas con una finalidad absolutamente espuria y basada en noticias periodísticas sin más. Sin una investigación complementaria y contradiciendo la propia jurisprudencia del Tribunal Supremo”.
Un origen de “extrema derecha”
Una línea argumentativa que adoptó la ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez. Pues más allá de señalar que la esposa de Sánchez “tiene los mismos derechos que todas las mujeres y hombres españoles”, Rodríguez se detuvo en el origen del caso. La suya no fue una crítica tan explícita hacia el juez Peinado y su instrucción, sino que, implícitamente, se limitó a señalar que el germen de esta investigación proviene de “una iniciativa de una organización de extrema derecha”, en relación a Maños Limpias. La cual, agregó, “también ha tenido sus propios problemas con la administración de Justicia”.
Asimismo, intentando despejar cualquier atisbo de culpabilidad que pudiera tener Gómez, puso en valor el informe que la Guardia Civil entregó al juez Peinado. Un informe que, en su opinión, indica que “no hay caso”.
Por último, señaló como “sorprendente” que dicho caso esté “acompañado” por organizaciones políticas como el PP, “cada vez más en los mismos posicionamientos que estas organizaciones de extrema derecha”.
“Sortear el pasillo”
Horas después, el PP criticó el “intento desesperado” para proteger la imagen de Gómez y “sortear el paseíllo de la vergüenza” antes de su declaración. De esta manera se pronunció la formación liderada por Alberto Núñez Feijóo después de que la magistrada decana de Madrid, María Jesús del Barco, autorizara que Begoña Gómez acceda este viernes a los juzgados de Plaza de Castilla por el garaje del edificio por motivos de seguridad.
Al ser preguntados si el jefe del Ejecutivo “entrará al juzgado escondido con su mujer”, los populares añadieron que Pedro Sánchez “arrastra a toda la nación a una jornada indecente”. Según estos, Gómez “no habría incurrido en tales prácticas si no hubiera sido por la condición de presidente de su marido”.
