El caso Errejón acelera la refundación de la izquierda sin Díaz

Desde hace meses el coordinador general de IU, Antonio Maíllo, negocia con Pablo Iglesias un nuevo proyecto para unificar todas las siglas. El ex líder morado había puesto como condición que la vicepresidenta quedase fuera y Errejón será la coartada perfecta

Apenas han pasado 72 horas desde que saltase a los titulares el escándalo de Ínigo Errejón y a la izquierda del PSOE se aceleran los movimientos para una “refundación” de ese espacio entorno a Izquierda Unida con la venia de Pablo Iglesias. Las denuncias por violencia machista contra el portavoz de Sumar cayeron como una losa sobre Yolanda Díaz, que hoy comparecerá ante la prensa tras regresar de un viaje oficial a Colombia.

La vicepresidenta se afana en levantar un cortafuegos que le permita salir de una crisis que amenaza con acabar con su carrera política. En las propias filas de Sumar apuntan a que Yolanda Díaz tenía más que sospechas sobre los comportamientos de Errejón. “Lo sabían, se lo advirtieron”, aseguran algunas fuentes consultadas por Artículo14. “Errejón te puede dar muchos problemas”, le dijeron directamente.

Si las sospechas se convierten en evidencias la vicepresidenta tendría que dimitir de inmediato. Así lo reconocen incluso desde Moncloa donde la consigna es rescatar a Yolanda Díaz. “No nos vale un Sumar moribundo. O desaparece o nada”, zanjan fuentes de Ferraz. El propio Pedro Sánchez alabó ayer la “contundencia” con la que había actuado su compañera en el Consejo de ministros en una conversación informal con periodistas, en el avión rumbo a la India.

¿Resistirá Yolanda Díaz? “A largo plazo no”. El autor de esta afirmación trabaja en el proyecto llamado a reemplazar a Sumar. Desde hace meses el coordinador federal de IU, Antonio Maíllo, está en la tarea de recomponer relaciones con Unidas Podemos con el fin de volver a un proyecto unitario. Unas siglas que aglutinen a toda la izquierda ante el riesgo de que la fragmentación acabe por convertirles a todos en irrelevantes. “Algo nuevo con IU como pegamento de todos”, señalan las fuentes consultadas.

Uno de los principales escollos para la reunificación era el odio entre Yolanda Díaz y Pablo Iglesias. El exlíder morado siempre ha puesto como condición para que los suyos estén en este nuevo proyecto que su sucesora se quedase fuera. No olvida que Irene Montero, fue sacrificada de las listas en las últimas elecciones y también se la negó un ministerio.

Antes de que estallase el caso Errejón era un problema para Maíllo apartar a Yolanda Díaz, ahora ya tiene una coartada. El argumento será que al margen de si la vicepresidenta encubrió a su portavoz, Sumar ha quedado tocado en su esencia. Los protocolos antiabusos que exige la propia ley del “sólo sí es sí” que ellos aprobaron no estaban implementados siete meses después de votarse en una asamblea.

De esta forma Yolanda Díaz llegará herida de muerte a la batalla interna que se lleva fraguando hace meses tras los últimos varapalos electorales. La vicepresidenta es consciente de estos movimientos y de ahí que pese a que anunció que se retiraría tras las elecciones europeas, se ha blindado con su equipo de confianza: el ministro de Cultura, Ernest Urtasun y la secretaria de Comunicación de Sumar, Elizabeth Duval.

Pablo Iglesias no volverá

Con Yolanda Díaz fuera de juego, Iglesias aspira a tener un papel activo en la creación de las nuevas siglas, pero descarta a priori volver a la primera línea de la política. Su papel estará en los medios de comunicación. Maíllo, al que tanto en el mundo de Unidas Podemos como de Sumar se le respeta, tendrá que crear un nuevo líder o lideresa.

Diez años después del surgimiento de Podemos, IU está llamada a volver a ser el eje de la izquierda del PSOE si el espacio sobrevive a la crisis abierta por las acusaciones contra Errejón, que en los próximos días tendrá que prestar declaración ante el juez tras la denuncia de la actriz, Elisa Mouliaá.

Desde el entorno de Yolanda Díaz siguen negando que conociese estos comportamientos, pero son conscientes de que la opinión pública requiere “una mayor explicación”. “Era muy difícil tener certezas de todo lo que está saliendo ahora”, reivindican desde su equipo.

Las explicaciones llegarán esta tarde después de que el grupo parlamentario elija nuevo portavoz. Las fuentes consultadas colocan como favoritas a Aina Vidal -uno de los rostros más visibles actualmente- o Verónica Martínez.

TAGS DE ESTA NOTICIA