política exterior

Diplomáticos denuncian la “vulneración de la igualdad de género” en los puestos en el exterior

Afirman que Albares no cumple con el plan de Acción Exterior que garantiza el acceso de cónyuges de funcionarios a plazas de trabajo y censuran que no disponen siquiera del billete de arraigo para visitar a sus familiares

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares Kiloycuarto

Parece que a José Manuel Albares la buscada imagen de ministro feminista se le complica. Pese a desarrollar un plan de Acción 2023-24 con un Grupo de Alto Nivel para defender los derechos del sexo femenino en el exterior, o iniciativas como la concesión de premios a mujeres destacadas por su trayectoria profesional, la realidad del día a día coloca al responsable de la cartera de Asuntos Exteriores en un brete.

La Asociación de Diplomáticos Españoles -ADE- se reunió este martes con la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado, encuentro al que sólo asistió el Grupo Popular, lo que ha causado cierto malestar, ya que afirman “se trata de la defensa a los intereses de los españoles y el servicio exterior”.

Entre los asuntos planteados de mayor importancia, la junta directiva del sindicato trasladó su preocupación por la situación de vulnerabilidad que viven principalmente las mujeres en el exterior, tanto las cónyuges como las propias funcionarias.

Según el plan de Acción Exterior de 2014, los cónyuges o parejas de  embajadores, cónsules y funcionarios de la Administración General del Estado destinados en el exterior tienen preferencia a la hora de acceder a plazas de trabajo. Una medida que se adoptó para facilitar el desplazamiento de la familia al completo al exterior y que, para evitar la discrecionalidad en la contratación, se estableció que el o la aspirante debía cumplir con los requisitos exigidos para el puesto requerido.

Sin embargo, según denuncian desde la ADE, esta garantía no se está cumpliendo, y el sector femenino es el principal afectado ya que, hoy por hoy, hay mayoría de hombres destinados en el exterior. Lo que conlleva que la mujer tenga que dejar su trabajo sin que se le garantice poder desarrollar su carrera profesional en el lugar de destino. “Esto no afecta sólo a diplomáticos, sino principalmente a aquellos enviados al exterior con menor nivel retributivo, ya que necesitan ingresos por ambas partes”, explica Alberto Virella, presidente de la Asociación. “Hay una clara discriminación y vulneración de la igualdad de género en la falta de medidas de conciliación familiar”.

El ministro de Asuntos Exteriores, en el Senado

El ministro de Asuntos Exteriores, durante su intervención en el Senado

La Asociación de familiares de funcionarios españoles en el exterior canaliza estas reivindicaciones que no se ciñen únicamente a la falta de bolsa de empleo del cónyuge, quien tiene complicado encontrar la solución por su cuenta por muchos factores: idioma, distintos procedimientos burocráticos, etc. También se da la situación de que, no sólo el ministerio de Asuntos Exteriores no activa la maquinaria para que el Plan de Acción Exterior se cumpla, según denuncian, si no que tampoco pueden cotizar, no se les garantiza las prestaciones sanitarias ni pueden acceder a un seguro.

Las funcionarias, también en situación vulnerable

Según recoge una encuesta del Tribunal de Cuentas, en las mujeres que proyectan su carrera en el exterior pesa hasta un 80% a la hora de elegir el destino el que haya mecanismos de conciliación, ya que si algunos hombres viven separados de sus familias durante un tiempo, la mujer suele no querer separarse de sus hijos. Y es que aquí entra otro punto de discordia: la educación de los vástagos y ayudas tan asentadas en otros países como el billete de arraigo anual.

“Los niños que están sometidos a un estrés por el cambio de país, de sistema educativo y de idioma, les sumas que no hay apoyo. Hay muchos países donde no hay un Instituto Español”, explica Virella, “Y son países en los que a veces los únicos centros educativos adecuados son los homólogos al Liceo francés,  Colegio Americano o el Internacional, que evidentemente son más caros”, explica Virella. “Países como Portugal o Grecia tienen eso contemplado”. Como también lo tienen la facilitación del billete de arraigo anual, o lo que es lo mismo, la financiación de un billete de avión para que los funcionarios puedan visitar a sus familias. “España lo tenía desde 2008 y está en suspenso”, asegura.

Aprobación del reglamento

Para añadir a esta coyuntura, Albares tiene en vilo, desde hace cuatro años, cuando fue nombrado ministro de Asuntos Exteriores, la aprobación del Reglamento de la carrera diplomática. Un documento sobre el que trabajó la anterior ministra, Arancha González Laya, y que su sucesor aseguró aprobaría tras unos “retoques” sobre el mismo. Pero esta aprobación no se ha llegado a producir.

Los Reyes, en el Pardo

Los Reyes, en el Palacio de El Pardo, con Pedro Sánchez y el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, detrás

Entre otras cuestiones, el documento de Laya trataba de reducir los plazos para que una mujer llegara a ser embajadora de un país. Esté uno de acuerdo o no con la propuesta, congeniaba con la misión de garante de la igualdad de la mujer que se ha autoasignado el ministro.

Además, dicho documento establece cuáles son los plazos normales para que un embajador esté destinado en un país. “Normalmente son cuatro años, y no menos de tres si no se ha cometido que se sepa ninguna falta grave o infracción”, afirma el presidente de la ADE. “Y si la ha cometido pues que se abra un expediente”. Posponer la entrada en vigor del reglamento facilita que Albares se acoja a la discrecionalidad para nombrar y cesar al embajador cuando lo considere.

Desde la ADE se ha enviado misivas a Albares sin acuse de recibo ni contestación, pero sí a través del subsecretario. “Sigue el temor a que se tomen represalias sobre alguien con una actitud crítica”, afirma Virella, quien sostiene que por este motivo se ha producido un incremento de asociados del 2%.