Durante su participación en la II Academia de la Juventud Madrileña de Nuevas Generaciones, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, criticó duramente la gestión del gobierno de Pedro Sánchez en materia de inmigración, acusándolo de “dar la espalda a la verdad”. Según Ayuso, la falta de control en las fronteras y la ausencia de una estrategia clara están generando problemas de convivencia en varias regiones de España.
La líder del PP madrileño señaló que “hay un descontrol absoluto en la frontera en Barajas” y denunció que en campamentos como el de Alcalá de Henares, diseñados para acoger entre 1.400 y 1.600 personas, ya han pasado más de 6.000. Ayuso criticó la falta de seguimiento y control sobre los inmigrantes, afirmando que “no se sabe quiénes son, ni qué tienen, ni dónde están”.
La presidenta también subrayó la necesidad de que la Unión Europea esté involucrada en la gestión de la inmigración, ya que se trata de un problema que afecta a todo el continente. Para Ayuso, la solución pasa por reforzar la protección en las fronteras y adoptar medidas similares a las implementadas en países como Estados Unidos o Canadá, donde el control de quienes entran es más estricto.
Ayuso señaló que España es una “región de acogida” y que la inmigración puede ser una oportunidad si se gestiona correctamente, con estrategias que fomenten la integración, el empleo y la formación. Sin embargo, alertó que la actual gestión del gobierno central solo busca “salvar la cara” y abandona a los inmigrantes “a su suerte”, lo que está provocando tensiones sociales.
La presidenta finalizó su intervención comparando la situación en España con otros países europeos, como Italia bajo el liderazgo de Giorgia Meloni, y pidió que se adopten medidas más contundentes antes de que los problemas de convivencia sigan creciendo.