Cuerpo calma a las autonomías del PP: “De momento, colaboramos”

Albergaban recelos tras las proclamas de Junts y han arrancado algunos compromisos al ministro de Economía, que asegura que mantendrá "contacto continuo" con Génova

Carlos Cuerpo.
KiloyCuarto

Una semana después de romper el hielo, la relación entre el Gobierno y el PP a cuenta del plan antiaranceles ha experimentado las subidas y bajadas propias de una montaña rusa, con conato de ruptura y acusaciones cruzadas incluidas. El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, prometió este jueves que tratará de generar “un entorno de confianza” y de “contacto continuo” con el vicesecretario de Economía del Partido Popular, Juan Bravo.

Cuerpo compareció en rueda de prensa en su Ministerio este jueves, tras reunir al Consejo Interterritorial de Internacionalización, en el que se sientan el Ejecutivo y todas las comunidades autónomas. Los 12 Gobiernos autonómicos del PP (más Ceuta y Melilla) acudían a esta cita con recelos y dudas, después de que Junts per Cataluña anunciara el martes un supuesto acuerdo con Moncloa para garantizar que un 25% de las ayudas del primer paquete aprobado por el Consejo de Ministros se reservase para las empresas que operan en Cataluña.

Hay reticencias a confiar en el Ejecutivo de Pedro Sánchez, y los conservadores no perdonan que efectuara cambios menores en el real decreto ley del martes sin avisarles. Tampoco que el propio Cuerpo rechazase aclararles personal y públicamente que se trata de una escenificación más del partido de Carles Puigdemont. Pero, después de denunciar que el supuesto pacto actuaría como “un misil” de confirmarse, y de que el Gobierno desmintiera a Junts -midiendo al milímetro-, han optado por rebajar el umbral de decibelios.

En su comparecencia, el ministro trató de espantar estos temores: “Las ayudas van a llegar a las empresas que lo necesiten. Que tengan tranquilidad, que aquellas que lo necesiten van a poder acceder y no van a competir entre ellas.

En el caso de que necesitáramos elevar los techos [el volumen de recursos financieros disponibles], por supuesto que lo haríamos”. Al terminar el pleno en el Congreso de los Diputados, al filo de las 16.00, fuentes del PP declaraban no haber recibido llamadas de los Gobiernos autonómicos para explicarles el desarrollo del encuentro entre Cuerpo y las CCAA: “Una buena señal”, admitieron.

“De momento, colaboraremos”, resumen a Artículo14 desde uno de los territorios gobernados por un barón del PP. “Buen rollo, pero nada nuevo”, abundan. Cuerpo presumió de que habían mantenido “una reunión constructiva y muy productiva”; que mantuvieron “una discusión muy rica”, que les ayuda a afianzar “el análisis interno” de la situación. Las comunidades autónomas compartieron información sobre cómo pueden afectar en sus territorios los aranceles de EEUU tras la prórroga de 90 días decretada por Donald Trump -que no afecta a los aranceles del 10% a las exportaciones-.

Y sacaron a Cuerpo el compromiso de reunirse mensualmente con ellas, para estudiar la evolución de la situación “en tiempo real” y contemplar la aplicación de nuevas recetas, tras el primer paquete aprobado por el Ejecutivo.

También pactaron crear grupos de seguimiento semanal, en los que participarán los directores generales con competencias en Comercio. En última instancia, se conformará un grupo de trabajo dirigido por el ICEX (entidad pública empresarial de ámbito nacional) para ayudar a las empresas a “resistir este shock” y “buscar mercados alternativos”.

Por lo pronto, el siguiente foco estará puesto en la definición de los detalles de las líneas de avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO), por valor de 5.000 millones de euros. El real decreto ley aprobado el martes no los aborda, y es necesario un nuevo acuerdo del Consejo de Ministros para hacerlo. “Me comprometí”, afirmó Cuerpo, a que “los compartiríamos con ellos”.

PP y Podemos se miran de reojo

La situación es de calma tensa. Si el Gobierno ha cargado contra el PP acusándole de buscar excusas para levantarse de la mesa de negociaciones, los conservadores han asegurado que el anuncio de Junts dilapidó buena parte de su confianza en Cuerpo.

Moncloa cree que contará con el respaldo de todos sus socios para aprobar el decreto. Prevén que el PP vote a favor o se abstenga, salvo que alguno de sus socios decida no avalarles, haciendo que queden en manos de los conservadores. El texto llegará a la Cámara Baja para su convalidación al inicio de mayo; aún hay tiempo para pelear los respaldos.

“Ayer se trasladó una imagen y un consenso en el Congreso de que estas medidas son buenas. A lo mejor no son suficientes si la situación se deteriora, es una primera capa. Pero el diagnóstico que yo escuché es positivo, espero que pueda haber un acuerdo y que podamos tener un apoyo mayoritario, también del PP”, aventuró el ministro.

Podemos es quien más trabas ha puesto hasta el momento, y los morados reconocen que estarán muy pendientes de la evolución del discurso del PP. Los conservadores, en esto, harán lo propio. Ven arriesgado votar en contra ante un tema tan sensible, tan alejado de las disputas domésticas. Pero advierten al Gobierno de que hoy no tiene atados los apoyos.

El Ejecutivo rechaza alargar la vida útil de las centrales nucleares

El PP ha deslizado en las últimas horas que alargar la vida útil de las centrales nucleares sería un buen gesto por parte del Gobierno, una forma de acercar posturas. Es una de las banderas de los conservadores, y una cuestión con la que ya han hecho piña con Junts per Cataluña, pero siempre con iniciativas no vinculantes. La semana pasada presentaron una proposición de ley en el Congreso que persigue exactamente este objetivo.

Afirman que serviría para evitar subidas drásticas del precio de la luz, para proteger el empleo asociado a las centrales nucleares y para sostener las capacidades industriales. No condicionan su voto explícitamente, pero dejan ver que una cesión en esta materia, aunque el Ejecutivo decidiese que fuera Junts quien se colgase esta medalla, supondría cobrarse una pieza de caza mayor.

“Es una línea roja”, advierten desde el Gobierno, dando portazo a esta idea. PP, Vox y Junts sumarían los votos necesarios para iniciar la tramitación de la proposición de ley de los conservadores, pero en la coalición se cierran en banda. Sostienen que, en la UE, sólo Francia aboga por este escenario, y afirman que aquí no hay margen para el entendimiento. Un día más, los puentes siguen siendo transitables.