Sumar intenta salir del abismo en el que le situó el escándalo que afecta a Íñigo Errejón y su posterior dimisión como portavoz parlamentario, tras ser acusado de actos de violencia sexual contra varias mujeres. Se trata de la madre de todas las crisis, que les ha sumido en una situación “dramática” y sin precedentes, como reconocen en el partido de Yolanda Díaz.
El incendio generado por las circunstancias que rodean a la salida de Errejón ha perdido foco estos días, ante la enorme gravedad de los efectos de la dana registrada la pasada semana, que tuvo especial virulencia en la Comunidad Valenciana. Pero en el partido de Yolanda Díaz ni siquiera han comenzado con la reconstrucción tras la traumática salida forzosa de uno de sus primeros espadas en lo estratégico y mediático. El primer paso lo darán este martes.
Fuentes de la formación de la vicepresidenta segunda aseguran que será una mujer quien asuma el encargo de ponerse al frente de la Portavocía en un momento de máxima debilidad. Y quien parte como favorita en todas las quinielas, es la diputada gallega Verónica Martínez Barbero, dentro de la cuota del partido Movimiento Sumar. Según estas fuentes, es quien Sumar estudia designar portavoz en la reunión que se celebrará a las 10.00.
Inspectora de Trabajo y Seguridad Social en excedencia y exdirectora general de Trabajo en la anterior legislatura, goza de la confianza de Díaz. Ha tenido un peso relevante en negociaciones como la que cristalizó en la esperada ley ELA, y en otras propias más centradas en su ámbito profesional. Es un perfil más técnico que el de la otra parlamentaria que también ha tenido un peso destacado en las quinielas estos días, la diputada Aina Vidal.
Portavoz adjunta de este espacio, Vidal lleva cuatro legislaturas en la cámara (desde 2016) y ofrece un perfil mucho más político. La mayoría de voces consultadas dan por hecho que será Barbero quien tomará la batuta de Errejón, convirtiéndose en la tercera portavoz de este espacio en algo más de un año de legislatura.
Vidal representa al mismo espacio que el portavoz del partido y ministro de Cultura, Ernest Urtasun, y entregar a la formación catalana un nuevo puesto de máxima visibilidad (también cuentan con uno de los dos asientos en la Mesa del Congreso, el de Gerardo Pisarello), decantaría en su favor la balanza de poder interno y dificultaría la relación, ya muy tensa, con fuerzas como Izquierda Unida.
Durante la mañana, la secretaria de Organización de Movimiento Sumar, Lara Hernández, afirmó que la elección de quien ostentará la Portavocía se hará de forma “totalmente coordinada” con la decena de partidos que integran el grupo parlamentario. Lo previsto es que este martes oficialicen la designación de la nueva portavoz, pero es difícil que también logren cerrar la reestructuración del grupo parlamentario que reclaman IU y Compromís, y que ya ha sido aceptada por fuentes de la dirección del partido de Díaz.
La coalición de izquierdas que lidera Antonio Maíllo lleva tiempo reclamando estos cambios, que afectarían al reparto de posiciones entre las fuerzas que vertebran Sumar en las distintas comisiones parlamentarias, pero también a la forma de articular las decisiones en la dirección. Las críticas sobre la verticalidad en este espacio han chocado además con el vacío de poder evidenciado tras la dimisión de Díaz como coordinadora de Sumar.
La vicepresidenta, que ha mantenido su cargo al frente de su espacio en el Gobierno, ha tratado de marcar distancia con la crisis que afloró el 24 de octubre, con la dimisión de Errejón. Estos días, Díaz centra su acción política -y comunicativa- en las iniciativas que afectan al Ministerio de Trabajo, en un intento por reconstruir su capital político.
Hay figuras dentro del espacio que no dejan de señalar el rol de la vicepresidenta segunda a la hora de aupar a Errejón a la portavocía, o al entregarle la redacción de la ponencia política en la asamblea que el partido tenía previsto celebrar entre el 14 y el 15 de diciembre.
Está previsto que el grupo coordinador de la asamblea se reúna este domingo. Sobre la mesa está la opción de volver a retrasar esta asamblea, que perseguía dotar a la organización de Díaz de una verdadera estructura. También debería designar a un nuevo líder que tape las vías de agua abiertas tras la dimisión de la vicepresidenta segunda, que apenas estuvo oficialmente tres meses al frente de la plataforma creada por ella misma.
A la impotencia, la desesperación o la incertidumbre por la viabilidad del proyecto se suma estos días la descoordinación en este espacio político. Afecta a cuestiones con la enjundia de la convocatoria del estado de alarma en las zonas más afectadas por la dana, que ya la reclaman abiertamente IU y Compromís, así como los cuatro diputados de Podemos (grupo mixto).
En la rueda de prensa de apertura de la semana política, la propia Hernández y la secretaria de Comunicación, Elizabeth Duval, no supieron aclarar la posición de la izquierda a la izquierda del PSOE en esta materia, mientras que los partidos que integran esta alianza les marcaban el paso. Sumar no tenía posición propia sobre una cuestión que depende del Consejo de Ministros del que forman parte.